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.3 EXPERIENCIAS DE CAPTURA DE NIEBLAS EN ZONAS ÂRIDAS y SEMIÂRIDAS. Aplicaciôn a la repoblaciôn forestal A. ACOSTA,l, J. NAVARR02, A. GIODA,3, F. MOUTARDE 4 y A. MARTfNEZ DE AzAGRA5 1.3.1.- Introducci6n En el momento actual, en que se nos insiste permanentemente sobre el impacto que en nuestros ecosistemas y forma de vida va a producir el "cambio cûmatico", asociado al "avance dei desierto" y a "la desertificaci6n descontrolada" en las re- giones subnumedas secas, semiàridas y aridas, nos permitiremos lIamar la aten- ci6n sobre el enorme potencial que, como recurso hfdrico, presentan las lIamadas "precipitaciones horizontales y ocultas". De entre todas ellas, destacamos funda- mentalmente, por su mayor relevancia, la niebla. Este hidrometeoro, parad6jica- mente, se produce con una frecuencia inusitada en algunas de las regiones con mas bajas precipitaciones de nues- tro planeta, coma son los desiertos de Atacama (figura 1), desierto costero de Perû, Namibia, la Penfnsula Arabica, 0 en los Archipiélagos de Ganarias y Cabo Verde, la baja California, etc. En estas lugares, la lIuvia suele ser relativamente baja 0 no concordante con algunas de las cubiertas vegetales que alli se sustentan. Los valores de Figura 1: Desierto de Atacama (Chi le) precipitaci6n anual pueden descender a 1 6 15 mm anuales, casa extremo dei desierto de Atacama donde, sin embargo existen ciertas cubiertas arboladas singu- lares. En algunas islas de bajo relieve como Lanzarote, Sai, Mayo, que apenas al- canzan los 150 mm anuales, se practica una agricultura notable combinando con Ingeniero Agr6nomo y Agrometeor610g0 Especialista de la Organizaciôn Mundial de Meteorologîa. Mon- tevideo. Uruguay. 2 Dr. lngeniero de Montes. Profesor Titular de Hidrologia Forestai y Restauraci6n de Areas Degradadas. E.T.S. de Ingenierias Agrarias de Palencia. Dpto. de lngeniena Agricola y Forestal. Universidad de Valladolid. Espana, 3 Dr. lnvestigador deliRD (Institut de Recherche pour leDevéloppement). Francia lnvestigadora dellFEA. CNRS. Lima. Peru. Dr. Ingeniero de Montes. Catedrat'co de Hidraulica e Hidrologia Forestal. E.T.S. de Ingenierias Agrarias de Palencia. Dpto. de Ingenieria Agricola y Forestal. Universidad de Valladolid. Espana,

Institut de recherche pour le développement - .3 EXPERIENCIAS DECAPTURA DENIEBLAShorizon.documentation.ird.fr/exl-doc/pleins_textes/... · 2019. 9. 19. · Agura 5: Representacl6n

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  • .3 EXPERIENCIAS DE CAPTURA DE NIEBLASEN ZONAS ÂRIDAS y SEMIÂRIDAS.

    Aplicaciôn a la repoblaciôn forestal

    A. ACOSTA,l, J. NAVARR02, A. GIODA,3, F. MOUTARDE4 yA. MARTfNEZ DE AzAGRA5

    1.3.1.- Introducci6n

    En el momento actual, en que se nos insiste permanentemente sobre el impactoque en nuestros ecosistemas y forma de vida va a producir el "cambio cûmatico",asociado al "avance dei desierto" y a "la desertificaci6n descontrolada" en las re-giones subnumedas secas, semiàridas y aridas, nos permitiremos lIamar la aten-ci6n sobre el enorme potencial que, como recurso hfdrico, presentan las lIamadas"precipitaciones horizontales y ocultas". De entre todas ellas, destacamos funda-mentalmente, por su mayor relevancia, la niebla.

    Este hidrometeoro, parad6jica-mente, se produce con una frecuenciainusitada en algunas de las regionescon mas bajas precipitaciones de nues-tro planeta, coma son los desiertos deAtacama (figura 1), desierto costero dePerû, Namibia, la Penfnsula Arabica, 0en los Archipiélagos de Ganarias y CaboVerde, la baja California, etc.

    En estas lugares, la lIuvia suele serrelativamente baja 0 no concordantecon algunas de las cubiertas vegetalesque alli se sustentan. Los valores de

    Figura 1: Desierto de Atacama (Chi le) precipitaci6n anual pueden descender a1 6 15 mm anuales, casa extremo dei

    desierto de Atacama donde, sin embargo existen ciertas cubiertas arboladas singu-lares. En algunas islas de bajo relieve como Lanzarote, Sai, Mayo, que apenas al-canzan los 150 mm anuales, se practica una agricultura notable combinando con

    Ingeniero Agr6nomo yAgrometeor610g0 Especialista de la Organizaciôn Mundial de Meteorologîa. Mon-tevideo. Uruguay.2 Dr. lngeniero de Montes. Profesor Titular de Hidrologia Forestai y Restauraci6n de Areas Degradadas.E.T.S. de Ingenierias Agrarias de Palencia. Dpto. de lngeniena Agricola y Forestal. Universidad de Valladolid.Espana,3 Dr. lnvestigador deliRD (Institut de Recherche pour leDevéloppement). Francia

    lnvestigadora dellFEA. CNRS. Lima. Peru.Dr. Ingeniero de Montes. Catedrat'co de Hidraulica e Hidrologia Forestal. E.T.S. de Ingenierias Agrarias

    de Palencia. Dpto. de Ingenieria Agricola yForestal. Universidad de Valladolid. Espana,

  • 56 Introducci6n a la captaci6n de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

    Figura 3: Deforestacl6n hist6rica en Teruel(Espaiia) que ha convertido los basques origi-

    nales en auténticos desiertos

    FIgura 2: Cultivos en la Isla de Lanzarote, aprove-chando los aportes dei rocio y la humedad atrnosféri-

    ca, par enfriamiento dei aire en el fondo de hoyosdurante la noche

    estas esparsas y mfseras lIuvias otrasprecipitaciones horizontales, como sonel roclo y la niebla, u ocultas, como lahumedad atmosférica (figura 2).

    Increfblemente, gracias a estosaportes de agua menos convenciona-les, en algunas de las regiones indica-das se lIega a sobrepasar el valor de laprecipitacion media mundial sobre lastierras emergidas, unos 746 mm anua-les (Chang, 2003), aunque 10 recogidoen su totalidad, no se pueda registrarcon los pluviometros convencionales.Éstos miden unicamente la lIuvia y,algunas otras precipitaciones verticales(granizo, nieve....), pero para la medidadei roclo, la escarcha, 0 la niebla se

    necesitan otros instrumentos como los dros6metros (roclo y escarcha) 0 los nebli-n6metros (niebla).

    Debemos resaltar que, de manera muy especial, los técnicos forestales y lospolfticos, tienen en el future mas proximo la responsabilidad de devolver, en 10posible, las antiguas condiciones naturales de muchas regiones, hoy devastadas enun 90% por irresponsabilidad dei hombre (figura 3). Aigunos datos nos hablan de lavergüenza que significa que, a pesar de nuestros uavances culturales", sigamosmasacrando anualmente varios millones de hectareas de bosques de los cuales,irremisiblemente, una buena parte sufren procesos erosivos acusados y de deserti-ficaci6n.

    De manera que cada ano entre 1 y1'5 millones de hectareas se pierdencompletamente a causa de la desertifi-cacion (Bainbridge, 2007). Ésta se vepotenciada por un deficiente manejo dela tierra, la cubierta vegetal y el agua.La deforestacion anual en la Amazonfabrasilena alcanzo cifras entre1.100.000 ha y 2.900.000 ha en elperiodo 1988-1996 (WRI, 2000) y enAmérica Latina se queman cada ano 25millones de hectareas (Rodrfguez deSancho, 2007). En Europa, segun laComunidad Europea, solo en la cuenca

    mediterranea. se produce una media de 60.000 incendios al ano y se quemanunas 700.000 ha anuales (AEMA, 1998).

    Por otro lado, conviene resaltar, como en estos momentos que vivimos, la restau-racion dei basque aut6ctono en las tierras deforestadas constituye una de las accionesmas prometedoras para el secuestro de C02 en la lucha contra el ucambio climatico".

  • Agura 5: Representacl6n antlgua deiGaroé, Ârbol Santo, de la Isla de El

    Hierro (Canarias)

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    Agura 4: Restas dei basque de nleblas de lasLas Lomas de Atiqulpa, en el Deslerto Castero

    de Peru

    Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas

    A continuaci6n mostraremas algu-nos ejemplos ~de 10 que fue" en otrasépocas la cubierta vegetal natural y de 10que es hoy en dfa. Simplemente hemosde fijarnas en algunas reservas natura-les que se conservan en la actualidad,como reflejo de 10 que hace varios sigloso milenios ocupaban extensas superfi-cies boscosas. Asf tenemos el ParqueNacional de Garajonay, en las Islas ca-narias, como muestra dei bosque hume-do canario, el monte verde 0 laurisilva; LaReserva Nacional de las Lomas de La-chay, Las Lomas de Atiquipa y Taimara(figura 4) en Peru, 0 la Reserva Nacionalde la Pampa dei Tamarugal, en Chile,..., como repre-sentantes de una vegetaci6n singular producto de lapresencia de las nieblas en dichos lugares.

    Asociados a estas zonas, no podemos deja rde expresar algunas referencias hist6ricas sobrela presencia "milagrosa" de arbolado 0 cultivos enmedia de los desiertos y sin que aparentementehubiera nada dei conocimiento humano que 10pudiera justificar.

    Asf, en las lomas de Atiquipa, en Peru, ya habi-tadas hace mas de 5000 arïos, quedan restas decultivos en terrazas agrfcolas y canales de irrigaci6n(construcciones de Pueblo Viejo, terrazas de Mocca yOcopa,...), que mantuvieron a la poblaci6n nativahasta la lIegada de los esparïoles, aprovechando elagua de la niebla atrapada por el basque en lascotas mas altas. Esta agua alimentaba a los manan-tiales 0 cursos de agua que luego permitfan irrigarmediante las canalizaciones, los cultivos de las te-rrazas emplazadas en cotas mas bajas.

    Abundando en este proceso, resulta asom-brosa la conocida descripci6n que daba Fray Sar-tolomé de Las casas, reportera de Col6n en susviajes a América, al pasar frente a la Isla de ElHierro (canarias), sobre la presencia de ~un arbolque siempre tenÎa una nubecilla en su copa de la que chorreaba el agua que losnaturales conduCÎan a albercas desde donde bebÎan hombres y animales, salvan-dose durante las sequÎas extremas que azotaban esas regiones w• De este modo, Delas Casas describfa el fen6meno dei ~Garoé", un arbol fuente 0 ârbol santo (Ocoteafoetens), que captaba la niebla con su follaje para satisfacer la sed de los bimba-ches y que fuera arrasado por un vendaval en el ano 1610 (figura 5).

  • 58 Introduccion a la captacion de las precipitaciones horizontales yde las escorrentfas

    La busqueda de explicaciones, por los profesionales forestales, tlidrologos,agr6nomos, etc., que permitieran justificar como una vegetacion coma la laurisilva,con necesidades tlfdricas de 1.000 0 mas mm anuales, podfa desarrollarse en unmedia en que apenas se superaban los 500 mm; 0 sobre como entender laextracci6n de enormes caudales de agua de pozos y ga/erfas, cuyos volumenes nopodfan justificarse con los métodos convencionales de calculo ni con lascaracterfsticas geotlidrol6gicas y pluviométricas de la zona: lIuvia, escorrentfa,evapotranspiracion, etc., en lugares coma las Islas Canarias,...., constituyen lasinquietudes de las cuales nos dejaron traza los ingenieros forestales Ceballos yOrtufio en Tenerife y Nogales en Gran Canaria.

    Debemos resaltar también que en otras zonas, se encuentran rastros, tlacealgunos milenios, de la presencia de arboles como los aguacates, guayabos, etc.,en 10 que hoy se conoce al norte de Lima como Lomas de Lachay, y que fuerondestruidos por practicas agrfcolas y pastoriles inadecuadas a partir dei siglo XVI. Laconocida "Pampa dei Taramugal", hoy declarada Reserva Nacional, en medio deune de los desiertos mas secos dei mundo, el desierto de Atacama, que se extiendea 10 largo de las costas de Chile y Peru, es otro ejemplo similar al precedente.También en las Islas de Cabo Verde casi no quedaron vestigios de vegetaci6n acausa de un inadecuado manejo de la tierra, mientras que los documentashist6ricos nos hablan de antiguas exportaciones de "purgueiras"; es decir, plantasde ricino que cubrfan gran parte de/ Archipiélago y que eran utilizadas para la pro--ducci6n de carburantes (Acosta, 1996).

    Pero antes de continuar, diremos que las precipitaciones horizontales y ocul-tas son todos aquellos aportes de agua provenientes de la atm6sfera al suelo 0 alas plantas que no pueden ser medidos con los instrumentos convencionales, comopor ejemplo, un pluvi6metro; pero que pueden suministrar en algunos lugares, unacantidad extra de "Uuvia" suficiente para mantener ciertas cubiertas vegetales,cultivos, abrevar ganado 0 abastecer de agua a ciertas comunidades. Estas precipi-taciones son, en orden de importancia para nosotros: la niebla, el rocfo, la hume-dad atmosférica y la escarcha.

    Entre sus aplicaciones, ademas de las agroforestales, la niebla tiene tambiénotras importantfsimas, como son el abastecimiento de agua potable a nucleos familia-res, pequefias poblaciones, creaci6n de manantiales, alimentacion de acufferos, etc.

    Sin embargo, no se trata aquf de desarrollar una extensa resena hist6rica, pe-ro es una buena ocasi6n para plasmar y resaltar ciertas referencias en las investi-gaciones sobre el tema y de rescatar algunos trabajos de gran importancia para elestado aetual dei conocimiento de este tema, pero que han pasado de algun mododesapercibidos dentro de la Iiteratura cientffico - técnica publicada (Acosta, 2003) ymerecen al menos unos parrafos dentro de este documenta.

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    fIgUra 7: Diversos Upos de mallas captadoras deniebla en las pioneras experiendas de German Safi

    Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas

    Hace aproximadamente 40 anos,que en pleno desierto de Atacama sefunda la Universidad dei Norte en Antofa-gasta (Chi le). Entre sus docentes sehallan un sacerdote y ffsico uruguayo,German Saa, y un ffsico chileno, CarlosEspinosa, pertenecientes al Departamen-to de Ffsica de dicha Universidad. En esazona la pluviometrfa anual oscila entre 1y 15 mm, es decir lIueve cada 10 -11anos.

    En las primeras recorridos por el te-rreno se encuentran con el apasionantefen6meno de la "Camanchaca", nuberasante que se produce en las montanasorientadas a barlovento deI alisio, que enel hemisferio sur sopla dei sur-suroeste ya partir de los 500 - 600 m de altitud. Deinmediato, observando la condensaci6nde agua que se produce en ciertos pun-tos y la humedad que se captura en eltejido de sus vestimentas a causa de lasdensas nieblas, piensan en la posibilidadde obtener agua a partir de la misma, Figura 6: German Saa revisando los atrapanieblasparô lô5 5LJ~,'IÛôs poblaciüi-'65 pesyuaras experimentales en el desierto de Atacama

    de la regi6n; ya que éstas recibfan elpreciado recurso mediante transporte encisterna, resultando un agua de pésimacalidad y extremadamente cara (Soto,2000). German Saa y Carlos Espinosaestudian la niebla cualitativa y cuantitati-vamente y comprenden la enorme impor-tancia dei fen6meno que ocurre parale-lamente a la frecuencia dei alisio, entre200 a 220 dfas al ano (Saa y Valdéz,1963; Espinosa, 1977).

    De modo que, sin dilaci6n, co-mienzan a instalar diferentes aparatosde su propio diseno (atrapanieblas uhomiclémetros) y ademas, al sacerdotejesuita German Saa, se le ocurre la ideade aprovechar el agua para instalar algunos arboles en la inmensidad dei desierto,siendo sin duda, el pionero en la reforestaci6n a partir de las nieblas (figura 6 y 7).Alif qued6 como unico testimonio vivo visible, a gran distancia, el que lIegara a serfamoso ciprés y que diera nombre al lugar: "Loma dei Ciprés" (figura 8). Con menos

  • Figura 8: Loma dei Ciprés en el Parque de SanJorge (ChUe)

    60 Introducci6n a la captaci6n de las precipitaciones horizontales y de las escorrentias

    suerte que el "Garoé" de El Hierro, ape-nas vivio unos 30 anos sucumbiendocomo el de Canarias ante un vendaval.

    En cuanto al rodo, otra fuente inte-resante de captacion de agua en ciertasregiones (Chaptal, 1928), debemos acla-rar que, si bien es cierto que diversasinvestigaciones en cuanto a su cuantifi-cacion apenas han lIegado a un maximade 150 mm al ano, hay que tener claroque no debe despreciarse y que puedeaportar agua suficiente para algunosusos en determinados lugares (véaseBeysens et al., en este documento). Dehecho, ningun ser vivo puede subsistirsin agua y cuando nos enfrentamos auna colonia de seres vivos en un mediaen que aparentemente el/a no existe,debemos investigar los mecanismos queesos seres utilizan para hacerse con lamisma. De modo que el roc/o, la escar-cha, 0 la propia humedad atmosférica,

    en algunas regiones aridas constituyen el soporte de vegetacion 0 incluso de culti-vos y pueblos (Laureano, 2005).

    Diversas investigaciones han lIegado a comprobar que la mayor parte de lasespecies vegetales, a falta de agua en el suelo para ser utilizada por sus mecanis-mos normales, las rafces, utilizan su fol/aje para absorber el vapor de agua direc-tamente de la atmosfera cuando la humedad relativa deI aire sobrepasa el 78% y,en numerosos casos, hemos observado que ello se produce con menos humedadatmosférica aun. En bastantes ocasiones, la humedad deI aire, el rocfo y las nieblasse complementan creando vida donde, por la baja pluviometrfa, no podrfa existir.

    Resumiendo: después de /0 expuesto en los ejemplos de captura de nieblaspor el Garoé de las Islas Canarias y por las experiencias de German Saa y CarlosEspinosa con la Camanchaca, asf como con otros trabajos posteriores de otrosinvestigadores en ambas regiones, se pueden asegurar las grandes posibilidadesde aplicacion de este recurso a la agricultura, el potencial de su utilizaci6n parapoder recuperar vastas regiones deforestadas por el hombre y para mejorar la cali-dad de vida de muchos asentamientos humanos que viven con enormes carencias,facilitandoles agua potable a bajo costa y para el riego de un pequeno huerto desubsistencia. Todo ello solo con /a aplicacion de técnicas muy simples ya su a/can-ce, que debemos divulgar, y muchas de las cua/es se hallan inspiradas en la propianaturaleza.

  • Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas 61

    Agura 11: Captacion de nleblas en las Lomasde Atiquipa y Taimara (Perd)

    Figura 9: Mallas de captaclon de nleblas en elproyecto de Chungungo

    Agura 10: Ellngenlero Acosta seiiala el depositode abastecimlento a Chungungo con el caudal

    proveniente dei ordeiio de la niebla

    Ya a partir de 1980 en CaboVerde, mejorando unas viejas insta-laciones con mallas mosquiterasinstaladas por el ingeniero ReisCunha, Acosta comenzo a obteneragua para una estacion experimen-tal allf existente. Posteriormente seha hecho a partir de va rios arbolespara pequenos nOcleos campesinos.

    Pero la culminacion de los en-sayos sobre captura de nieblas enChile, lIega cuando a partir de lasexperiencias de la Corporacion Na-cional Forestal, en 1982, con mallasde plastico, se complementan 2.400m2 de superficie recolectora y seobtiene el agua necesaria paraabastecer al poblado de Chungungo(casi 400 habitantes) con una dota-cion aproximada de 30 Ijdfaxhabi-tante (figura 9 y 10), en pleno desier-ta de Atacama.

    A continuaci6n, en las proximi-dades de Lima con el mismo sistema,en 1993, se obtiene agua suficientepara el colegio Villa Caritas. Tambiénen las proximidades de Lima se haninstalado 3.000 m2 de malla para unproyecto forestal, asf como 15 atra-panieblas colocados en las Lomas deAtiquipa y Taimara, en PerO, quesuministran a cuatro depositos deagua con una capacidad total de2000 m3 (figura 11).

    Pero antes de continuar serfaconveniente repasar algunos concep-tos de Hidrometeorologfa que ayuda-ran a comprender las experienciasaquf descritas.

    1 •

  • 62 Introducci6n a la captacion de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

    1.3.2.- Definiciones

    A) Conceptos previos

    Desde el punta de vista meteorologico se define la NIEBLA como una suspen-sion en la atmosfera de muy pequeiias gotitas de agua, en general microscopicas(10-2 mm de diametro medio) que reducen la visibilidad en la superficie horizontal.

    Aunque esta definicion subraya el efecto sobre la visibilidad, 10 cual dependede la estructura de la niebla y, especialmente, dei tamaiio de las gotas; atendiendoa esta cuestion, en la practica se establecen dos grados importantes de intensidadde nieblas:

    a) NIEBLA, propiamente dicha, cuando la visibilidad horizontal es inferior a 1km (WMO, 1966).

    b) NEBUNA, cuando dicha visibilidad oscila entre 1 y 5 a 10 kilometros (al-gunas clasificaciones aplican el término BRUMA, cuando la visibilidad essuperior a los 2 kilometros-véase apartado 1.2 de este documento).

    En cuanto al origen de este hidrometeoro, podemos diferenciar tres tipos denieblas:

    1) NIEBLAS DE RADIACION 0 ESTÂTICAS: Se engendran de forma similar alrocfo; se debe producir un enfriamiento directo sobre las capas bajas dela atmosfera hasta alcanzar el punto de rocfo. Las condiciones requeridaspara ellas son:

    Fuerte calentamiento diurno.

    Cielos despejados 0 poca nubosidad (de existir nubes deben ser al-tas).

    Viento en calma 0 suave brisa con velocidad inferior a 3 km/h, favore-ciendo un cierto grado de turbulencia.

    Inversion térmica a poca altura y humedad atmosférica suficiente.

    Es esencialmente nocturna aunque suele prolongarse, en algunos ca-sos, a las primeras horas de la maiiana. También es mas frecuente entierra que en el mar. Suele situarse en los fondos de valle y en las hondo-nadas debido a que el aire frfo por ser mas denso desciende a las cotasmas bajas. Su espesor puede variar entre aigunos metros y varios cente-nares de metros.

    2) NIEBLAS DE ApVECCION 0 DINAMICAS: Son las que se originan a causadei desplazamiento de una masa de aire calido y humedo sobre una su-perficie frfa. Es muy frecuente en el mar, siendo uno de los principalesejemplos la que ocurre cuando la corriente calida dei Golfo bordea lasheladas aguas de la corriente frfa dei Labrador en Terranova. También lapuesta en contacta de las corrientes câlidas de Kuroshio y la frfa deOyashio en Japon, etc.

  • B) Instrumentas de detecci6n y medida

    Ya hemos indicado la inquietud de bastantes investigadores por lIegar a justi-ficar la presencia de otros aportes de humedad, en los bosques y cultivos, diferen-tes a las precipitaciones verticales. A principios dei siglo XX se producen dos expe-riencias muy similares, una de las cuales se emplaza en el ambito de hablahispana. Esta ultima fue emprendida por el meteorologo espanol Don Pio Pita quecolocando una ramita encima de un pluviometro en el observatorio de Izana(Tene-rife) comprob6 que las precipitaciones aumentaron 15-20 veces mas que en unDconvencional. Una observacion parecida fue hecha en Sudâfrica con resultadossemejantes.

    En la década de los anos 50, Grunow utiliza un juego de pluvi6metros, unD deellos con una rejilla de tejido mosquitero en su boca, con la superficie equivalente ala de interceptaci6n dei pluviometro normalizado (200 cm2) yexpuesta perpendicu-larmente al viento dominante (figura 13); a su lado emplaza otro, un pluviometronormal, que permite comparar la precipitacion vertical con la aportacion por nie-blas. Este juego de pluviometros fue homologado por la Organizacion Mundial deMeteorologia en 1953 y, a partir de entonces, se realizan muchas observacionescon el pluviometro de nieblas de Grunow.

    63Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas

    3) NIEBLAS OROGRAFICAS: Secaracterizan por un enfria-miento adiabatico cuandouna masa de aire humedo seve forzada a remontar unapendiente, produciéndose lacondensacion dei vapor deagua atmosférico (figura 12).En realidad es un tipo deniebla por adveccion, en laque el enfriamiento se debea la ascension dei aire calidoy humedo. Son las mas fre-cuentes (e interesantes) en Figura 12: Nieblas orograficas en Chilelas regiones montanosas ex-puestas al alisio en Canarias, Cabo Verde, Namibia, Chile, Peru, el oasisde Erkowit, el monz6n de Oman, etc. Estas nieblas atraviesan las monta-nas dejando la mayor parte de su humedad a barlovento y disipandose asotavento a la vez que originan en esta vertiente un efecto desecante porla subida de la temperatura y el menor contenido en humedad atmosféri-ca (efecto Foehn).

    En multiples ocasiones se producen nieblas de causas combinadascomo puede ser la entrada de aire maritimo cargado de humedad (ad-vecci6n) y su enfriamiento y condensacion al entrar en contacto con lasuperficie fria dei suelo (radiacion) 0 bien al ascender a causa de una ba-rrera montanosa (niebla orogrâfica).

  • 64 Introducci6n a la captaci6n de las precipitaciones horizontales y de las escorrentias

    Otros ensayos, como se cita ante-riormente, fueron efectuados esa mis-ma década por German Saa y CarlosEspinosa en Chile, con diversos apara-tos de su invencion. Estos instrumentoshan constituido la inspiracion de todo10 hecho hasta el presente para la co-secha de agua a partir de las nieblas.

    Figura 13: Pluvi6metro de Grunow en SerraMalagueta (Cabo Verde)

    C) Cuantificacion de las nieblas

    Siendo las nieblas un verdadero hidrometeoro, los métodos a utilizar en sumedida podemos decir que seran los mismos que se aplican en Hidraulica. La can-tidad de agua obtenida en una superficie expuesta a la niebla estara en funcion dela velocidad dei viento y dei contenido acuoso medio de la masa nubosa, que enesas condiciones se cifra en unos 0'5 glm3 de aire.

    Tapia y Zuleta, de la Universidad dei Norte de Antofagasta (Chile), sentaron lasbases para tener una unidad de medida que permitiese comparar resultados deinvestigaciones efectuadas en cualquier lugar dei mundo y con cualquier tipo deinstrumentos. Para ello establecieron como unidad de captacion la unidad de su-perficie vertical expuesta perpendicularmente al viento. En consecuencia, la canti-dad de agua captada sera igual a la superficie de obstaculo vertical expuesto por lavelocidad dei viento y por su contenido en gotas de agua (figura 14).

    De acuerdo con la figura 14, y aplicando la ecuacion de continuidad. se puedeexpresar genéricamente la cantidad de agua en masa por unidad de tiempo (Q)captada por la superficie expuesta (S), en funcion de la velocidad dei aire (V) y de laconcentracion de gotitas de agua en la niebla (qn) de la siguiente manera:

    Q=S x V X qn

    Dimensionalmente, esta expresion es correcta, ya que como se puede observar.

    Q(gis) =S (m2) x V (mis) x qn (glm3 )

    Sin embargo. el agua capturada depende de otras variables como puedan serla temperatura de la superficie de captacion, turbulencias dei aire en el sistemaatrapanieblas, densidad de la malla expuesta, etc. De modo que todas ellas puedenincluirse en 10 que denominamos eficiencia dei sistema 0 rendimiento (r) y la expre-sion final resultante es (Acosta, 2003):

  • Conviene subrayar antes de seguir, que el esquema de la figura 14 correspon-de al aprovechamiento de nieblas de advecci6n u orograficas, donde el aire se hallanotablemente humedo y en movimiento. Sin embargo, en ocasiones en las que lacantidad de agua atmosférica fuese pequena, se podrfa acoplar al sistema algunmecanismo que forzara una mayor eficacia 0 caudal de extracci6n, tal y como actU-an los deshumificadores domésticos 0 algunos irinovadores aparatos, que suminis-tran agua, enfriando la superficie de condensaci6n (10 que en la figura 14 serIa un"atrapanieblas") y la masa de aire por debajo dei punto de roclo. Por otro lado, si elaire humedo se mueve lentamente 0 como es el casa de las nieblas de radiaci6n,en las que el movimiento deI aire es practicamente nu/o, la posibilidad de utilizarun motor, a modo de ventilador 0 aspirador de la masa humeda, abre una Ifneainteresante de investigaci6n para un mayor aprovechamiento de este recurso enotras zonas.

    Estos dispositivos, puestos en funcionamiento a partir de la energfa provistapor paneles solares, permitirfan crear a muy bajo coste "fuentes" 0 "manantialesaéreos" para abastecimiento 0 para aplicaci6n agroforestal en zonas aridas, sin lasrestricciones propias de ubicaci6n de los atrapanieblas convencionales.

    En cualquier caso, para resaltar la importancia de este hidrometeoro se adjun-tan en las tablas 1 y 2 los resultados de ensayos de captaci6n efectuados en Chileyen otras lugares por diversos investigadores.

    Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas

    Q= S x V X qn X r

    Rgura 14: Relacl6n de variables en el proceso de interceptaciôn y captaciôn dei agua de niebla

    65

  • 66 Introduccion a la captacion de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

    Tabla 1: Resumen de resultados obtenidos por diferentes investigadores de la Universidaddei Norte (Antofagasta) sobre captacion de agua de 'camanchacas' en la costa norte deChile (Tapia y Zuleta, 1980)

    Investiga- Aparato emplea-Captacl6n espe-

    dorPeriodo Lugar

    docffica

    (m3jm2.ano)

    saa,G. y Arpa de hilosValdéz, M. 1962 Miramar (Olite) verticales

    1,11(1963)

    1962/1963

    Verano El Mirador Modelo cilfndrico 0,37

    Otono (Ollie)con 1300 hilos

    0,86Espinosa, C. verticales(1977) Primavera Loma dei Ciprés

    (patente numero1,30

    Invierno 611115) 1,64

    Promedlo 1,04

    1964Munoz, H.

    Verano Miramar (Olile) Malla rectangular 0,24(1967)

    Primavera 1,26

    06/08/63-17/08/64 El Mirador 0,12Muiioz,H.

    28/09/64-11/10/65(Olile) Arpa de hi/os

    0,10(1972) Estaci6n An- verticales

    24/08/67-12/02/68 dr6meda 0,22

    De Iquique alaltal (Chile)

    1968/1972 Michilla 'Tfpico' 0,51Burgos, C. El Mirador ParaleJepfpedo 0,83

    (1972)Miramar Malla saran 1,21

    Morro Moreno 1,90

    Promedio 1,11

    1968/1972

    Invierno 0,54

    Burgos, C. Verano Morro Moreno 1,24

    (1972) Primavera (Chile)'Tfpico'

    1,80

    Otoiio 2,47

    Promedio 1,90

    CONAF Malla Rachel

    (1986)1984 El lofo (Chile) 4,0

    n° 35

  • Tabla 3: Captaci6n de agua en Serra Malagueta (Cabo Verde).Perfodo: noviembre 1979 - octubre 1980 (Acosta, 1996)

    En la tabla 3 se adjuntan los resultados de Acosta realizados en Serra Malague-ta-Isla de Santiago-Cabo Verde, en el periodo comprendido entre el mes de noviem-bre de 1979 y octubre de 1980, que contribuyen a reforzar la notable importancia deeste fenomeno. De la tabla 3 se desprende como durante los meses de marzo, abri/,mayo y junio, donde las precipitaciones fueron practicamente nuJas, se registraron228'8 mm, 146'4 mm, 448'5 mm y 423'3 mm, respectivamente con el captor deGrunow. Entre los registros diarios es interesante destacar las cantidades de los dfas17 de septiembre, 4, 27, 28, 29 Y30 de agosto, 9,10, y 23 de junio, dfas en los quelas lIuvias fueron nulas, pero como producto de las nieblas se recogieron 37'4, 47'5,38'5,39'4,40'3,35'5,39'5,37'8 Y48'1 mm respeetivamente. Es decir, los registrosdiarios por nieblas oscilaron entre los casi 40 y 50 mm.

    - Precipitacl6n Precipitaci6n Difen,lnclaMes',,'c', .",' . "vert{cal(mm) .. . horizontal Y,vertlcaJ"" (mil)) ,

  • 68 Introduccion a la captacion de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

    A) Situaciones a considerar

    Figura 15: Ârboles supervivientes a las experien-cias de captura de niebla en El Tofo, para la

    poblaci6n de Chungungo (desierto de Atacama)

    MesPrecipitaci6n. Precipitaci6n Diferenciavertical (mm) horizontal y vertical* (mm) (mm)

    Septiembre 179,2 936,8 757,6Octubre 16,3 492,8 476,5

    TOTALES 698,5 4874,9 4176,4* Medida mediante el pluviometro de Grunow

    1.3.3.- Explotaci6n de las nieblas

    A los efectos de la explotaci6n de las nieblas, ya sea desde el punta de vistaagrfcola, ganadero 0 forestal, es precisa dividirlas en dos clases, debido a que porsu forma de presentarse, los métodos de aprovechamiento son totalmente diferen-tes. Asf pues consideraremos a) las nieblas estaticas (0 de radiaci6n) y b) las dina-micas (0 de advecci6n).

    Para el casa de nieblas estaticas (0 de radiaci6n) que se producen en condi-ciones de calma atmosférica. y visto que para su aprovechamiento es necesaria lapresencia deI viento, no cabe otra utilizaci6n que en agricultura. dado que, ante laausencia de este elemento, el volumen captable es reducido y s610 suficiente parala subsistencia de las plantas, sin producirse infiltraciones importantes en el suelo.

    Para el segundo caso, nieblas dinamicas (0 de advecci6n), el procedimientomas adecuado es la interposici6n de un obstaculo vertical a la direcci6n dei viento.Como ha quedado demostrado con los resultados de las tablas 1 y 2, la forestaci6ny reforestaci6n en las zonas aridas que cuentan con este valioso recurso naturalrenovable es posible. Ya que las aportaciones hfdricas por nieblas pueden superaren algunos lugares dei mundo, los 746 mm anuales de media de precipitaci6nmundial sobre las tierras emergidas, como ya se ha indicado. Por 10 tanto la utiliza-ci6n de este recurso constituye un excitante desaffo para quienes conocen el pro-blema de la creciente desertizaci6n de nuestro planeta y disponen dei conocimien-to de las aportaciones por precipitacio-nes horizontales como la niebla. Me-diante este hidrometeoro se podrfantransformar 0 recuperar bosques, enunos cuantos millones de hectareas,para frenar ese avance de los desiertosy el cambio c1imatico que tanto pre-ocupan a la Humanidad

    Sin embargo, 10 mas importanteno es s610 el hecho de la forestaci6n 0reforestaci6n de esas superficies, sinolas transformaciones socioecon6micascapaces de generarse en cada una deesas regiones. La transformaci6n de

  • B) Eleccion deI método

    Para tan ardua tarea tendremos varias alternativas a los efectos de asegurarel aguâ imprescindible a la planta en sus primeros anos y de acuerdc a la enverga-dura de nuestros planes.

    1°) Si el plan es ambicioso, sera seguramente mas conveniente instalar los grandescaptores de mallas que acumularan el agua en un deposito desde donde podremosregar los arbolitos en sus edades tempranas, hasta que desarrollen un porte 0 copasuficiente para capturar 10 necesario para su crecimiento. Ya hemos expresado quelos lugares mas adecuados para obtener buenos rendimientos se hal/an entre los700 m y 900 m de altitud, zona de influencia de los bancos de nubes Que formanlas nieblas.

    El riego. coma se puede deducir, no sera costoso, dada Que casi siempre sehara por gravedad. Basta para ello elegir el lugar optimo por encima de la zona deactuacion que capture la mayor cantidad de agua posible. No obstante, disponerredes de baja presion por goteo, donde la energfa necesaria pueda ser suministra-da por paneles solares, hoyes totalmente factible.

    Siguiendo este ejemplo podemos citar las experiencias que en Ayora (Valencia,Espafia) se estan realizando en repoblaciones experimentales con planta de un ano

    los estériles desiertos, por falta de agua, en terrenos fértiles dada la naturaleza desu sustrato y el aporte hfdrico por la captacion de nieblas, ofrece unos recursosalimentarios potenciales hasta ahora infrautilizados. En muchas lugares, donde laniebla esta presente con frecuencia y bastante intensidad, la forestacion no solosignificara el aporte de una superficie verde sobre el sombrfo gris actual de losdesiertos, sinD que, como se ha visto, esos arboles se transforman en colonizado-res individuales porque no solo son capaces de obtener el agua que necesitan parasf, sinD que aportan muchfsima mas agua al suelo que la necesaria, permitiendo eldesarrollo de una pequena horticultura de subsistencia.

    Con los importantes aportes de agua que hace el bosque al suelo. también seenriquece la capa freatica y dara posibilidades de creacion de acurferos subsuperfi-ciales. Ya en el ana 1951, los ingenieros de montes Ceballos y Ortuno en Tenerife yNogales en Gran Canaria, habfan observado que casi todas las nacientes de cursosde agua permanentes, tenfan su origen en las zonas de bosques y con nieblas.Estarfamos aquf ante el famoso dicho de la gallina y el huevo. c:.Qué fue primero?c:.EI bosque 0 la niebla? Observaciones parecidas se realizaron en Chile, Perd y enlas Islas de Cabo Verde.

    De acuerdo con 10 expuesto, no queda mas que actuar. Si se plantan arbolesen zonas propicias a este fen6meno crearemos 10 que representa M una cuencahidrogrâfica vertical" (figura 15) proveedora de cauces permanentes, que contribui-rfa a impulsar nuestro plan forestal. En los trabajos de Acosta (1973, 1996) se haobservado que las nieblas dinamicas surgen con una recurrencia superior a 200dras en Canarias, Cabo Verde, ChiJe y Perd; 10 que significa, que mediante la inter-ceptacion forestal, a través de las copas de los arboles, se puede proveer de unaMlluvia" continua a estas zonas.

    69Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas

  • 70 Introduccion a la captacion de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

    de Pinus pinaster y Quercus i1ex. Losensayos, comenzados en septiembrede 2007, constan de un panel de 18m2 situado 30 m por encima de lasparcelas de plantacion. Seis depositosde 1000 Iitros se encargan de recogerel agua de niebla capturada por dichopanel. Los brinzales, plantados en2500 m2 , reciben su dosis hidrica me-diante riego por goteo aplicado a 20-30cm de profundidad, para evitar unaexcesiva evaporacion. Aunque los resul-tados son provisionales, la superviven-cia de las plantas y su crecimiento, trasun ano, han aumentado con los riegosprocedentes de la niebla (Fuentes etal., 2008).2°) Si el plan se desarrollara en zonasmuy apartadas y de diffcil acceso, seramas conveniente adaptar a cada plantaun captor individual de mallas (figura16), como hemos mostrado, que seencargara de obtener el agua para elarbolito hasta que éste sea 10 suficien-temente fuerte para continuar solo.Esas mismas mallas podran seguirsiendo usadas en otra etapa de la plan-tacion. yaque son muy duraderas.

    Este método presenta una varian-te y es en la forma que se esta hacien-do en Peru. Inicialmente se plantan losarbolillos (por ejemplo: casuarinas) quepor porte y follaje constituyanexcelen-tes captores naturales y posteriormentese plantan otras especies que en unestrato inferior se benefician con elagua que escurre de su follaje.

    3°) Plantacion de arboles aislados. Eneste casa se trata de disponer unospocos arboles y no de una repoblacionforestal. Para esto, es convenienteemplazarlos en los lugares mas aventa-jados. En la pendiente adecuada, juntoa un captor natural ya existente, comauna roca saliente (reconociéndose éstapor la presencia de abundantes mus-

    Figura 16: Repoblaciones en Chileaprovechando la niebla

    Figura 17: La humedad captada de la caman·chaca por la roca y su sombra permiten el

    crecimiento de ciertas plantas y musgos en eldesierto de Atacama

  • D) caracterfsticas de la plantaci6n

    C) Eleccion dei lugar

    gos y Ifquenes), algun otro arbusto 0 un cactus (para este ultimo caso, no basta supresencia a no ser que aparezcan junto a él musgos y Ifquenes en cantidades nota-bles, ya que los cactus son plantas crasas adaptadas a subsistir sin apenas hume-dad). En la figura 17, por ejemplo, se observa el crecimiento de pequenas plantas ymusgos aprovechando la sombra y la humedad capturada por una roca en el de-sierto de Atacama.

    71Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas

    Ya se ha indicado anteriormente que la cota mas propicia para las nieblas sehalla entre los 700 y 900 m s.n.m. Luego este espacio altitudinal sera el mas con-veniente para iniciar un plan de reforestacion 0 de captacion de nieblas. No obstan-te, siempre es necesario reafizar observaciones suficientes sobre frecuencias denieblas, densidad de las mismas, posible captura de agua por las especies. Tobén yGil (2007) senalan que en los paramos andinos en Colombia la respuesta de lasespecies vegetales es variable en la captaci6n de agua procedente de niebla. Expe-riencias de Arvidsson sobre captura de rocfo por diversas plantas en Egipto, duran-te 1954-55, mostraron que especies como Tamarix articulata dieron una conside-rable aportaci6n al suera de agua de rocfo bajo las copas, mientras que éstasrctenfan poca cantidad, 10 que convierte a esta especie como buena captadorapara inducir el crecimiento de otras menos eficientes, en aquella regi6n; sin embar-go, otras especies como Casuarina stricta, en cambio, fueron muy poco eficaces enla captura de rocfo, por 10 que ésta no serfa apropiada para la reforestaci6n conprecipitaciones horizontales a causa de su baja interceptaci6n. En las Lomas deAtiquipa y Taimara (Peru) el arrayan (Myrcianthes ferreyrae) constituye un buencapturador natural de nieblas.

    Dentro dei rango de cotas descrito, las mejores exposiciones se encuentranevidentemente a barlovento, sobre todo, en las vaguadas, donde se presentan lasmejores condiciones de p/antaci6n, pues allf encontraremos mejores caracterfsticasedaficas y mayor profundidad de humedad. De hecho, Acosta ha observado enmuchos lugares de piedemonte, en cuyas cumbres se originan las nieblas, que seconstataba el agua freatica entre los 20 - 50 cm y, por 10 tanto, viables para unaplantaci6n directa de algunas especies forestales.

    MARCO DE REPOBLACI6N: La distancia entre los individuos debe ser superiora la normal, pues es necesario que el aire circule entre los arboles para dejar elagua suficiente para cada planta. Por 10 tanto debe irse a marcos de plantaci6namplios. Como sugerencia marcos de 5 m x 5 m 0 superiores seran necesarios parauna buena circulaci6n deI aire humedo cuando los arboles adquieren un porte im-portante. Si no, en reafidad, se crearfa en la primera Ifnea una pantalla cortavientosque perjudicarfa a los arbores dei interior de la masa.

  • 72 Introducci6n a la captaci6n de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

    Figura 18: El ingenlero Acosta inspecciona unaplantaci6n en el desierto de Atacama. El aportede riegos y de las nieblas es fundamental para

    el desarrollo de las mismas en funci6n de lafrecuencia de éstas ultimas

    ESPECIES A PLANTAR: Aigunas de las especies a plantar en algunas regionesse han sugerido de algun modo en los puntos anteriores al hablar sobre su aptitudcomo captores 0 no. Sin embargo es necesario tener en cuenta otras consideracio-nes.

    Se podra observar facilmente, cuando la plantacion es muy espesa, que soloapareceran mojados los ejemplares expuestos a la direccion de donde viene elviento. Los arboles que se encuentran al interior 10 estaran unicamente en aquellaspartes que sobresalgan a los primeros. Por ello, conociendo el porte de la madurezdei arbolado, se elegira la distancia entre pies para evitar una masa trabada, esdecir, que las copas no sean tangentes entre sI.

    Como se expreso anteriormente, cuando se planten especies que actuen co-mo captores naturales (casuarinas, arrayanes, taras, taramugos, pinos, eucalip-tos,...), deben situarse en diferentes estratos, poniendo bajo su sombra, las otrasespecies menos eficientes en la captacion de nieblas.

    En primer lugar, las especies a emplear deben seleccionarse de acuerdo alcomportamiento que puedan desarroflar bajo las condiciones propias de la zona(figura 18). As! por ejemplo, cuando en los anos 70 dei siglo pasado, pafses comoArgelia, Marruecos y Tunez decidieron construir la famosa "barrera verden (barragevert), consistente en un cinturon forestal de 20 m de anchura y toda la extensionque atravesaba de oeste a este el desierto dei Sahara, con el loable proposito de"cerrar las puertas al avance dei desierto·, se instalaron una gran diversidad deespecies foresta/es apoyandose en un sistema de riego mediante cisterna a de-manda. Es decir, se regaban las plantas solo cuando su aspecta denotaba estréshfdrico.

    En esas duras condiciones (precipitaciones entre 100 y 250 mm; temperatu-ras extremas-frfo por la noche y calido durante el dla-; suelos arenosos), hubo es-pecies que se adaptaron rapido (3-4 meses), otras requirieron un tratamiento cui-

    dadoso hasta su arraigo definitivo,mientras que otras, simplemente no seadaptaran y fenecieran.

    Este comportamiento de las espe-cies es aplicable también a las zonasde nieblas. Habra especies que seadapten deprisa (casuarinas, pinos,eucaliptos,...), mientras que otras ne-cesitaran de una cierta atencion duran-te sus primeras estadios, pero queluego seran capaces de prosperar poreflas mismas. Para otras especies ladificultad de supervivencia puede serextrema 0 inviable, segun las caracte-rfsticas edaticas, la frecuencia de nie-blas y la forma en que las nieblas de-positen el agua en el suelo.

  • Como ya se ha sefialado, durante las experiencias realizadas por Acosta, se hapodido observar que en zonas de nieblas, se puede encontrar un acuffero subsu-perficial a unos 20 - 50 cm de profundid,ad. En esta situaci6n basta conectar lasplantas al acuffero para conseguir su supervivencia, como sucede con Prosopistamarugo en Chile (Latorre, 1990), pero recordando que ciertas especies forestalesson sensibles al exceso de humedad edafica y, en consecuencia, no serian aptaspara este sistema. Otras especies mas freat6filas evolucionaran sin problemas.Una prospecci6n edatica previa a la plantaci6n de la zona para localizar flujos sub-terraneos resulta necesario, ya que si no existen, el crecimiento y desarrollo de lasplantas depende de las mallas captoras que se dispongan junto a ellas, ya sea anivel individual para el autoabastecimiento, 0 a nivel colectivo, para satisfacer susnecesidades mediante riego, como se hace en el proyecto de restauraci6n forestaldeI bosque natural de las Lomas de Atiquipa en Peru, donde los 1345 m2 de mallasatrapanieb/as instaladas permiten irrigar 30.000 arbustos de tara (Gaesalpiniaspinosa) y otras especies.

    En condiciones con captores individuales, algunas plantas incluso requeriranunos riegos de instalacion en los primeros meses, mientras se aseguran su auto-abastecimiento, y después se desarrollaran sin problema. Otras en cambio, exigiranun aporte extra de agua durante un tiempo mas prolongado, hasta que desarrollenuna copa y follaje capaz de captar agua suficiente de la niebla. La magnitud deestos riegos es funci6n de la especie elegida, de la intensidad de la niebla y de sufrecuencia. En las zonas en las que se han desarrollado las experiencias aquf ex-puestas, la frecuencia de nieblas oscila en intervalos de 8 a 10 dlas como maximo,hasta periodos de 1 dia. Por 10 tanto, en los lugares donde se dilata mas la presen-cia de la niebla es donde sera necesario disponer de un sistema de riego de apoyohasta que se consiga el arraigo de la planta y su autosuministro.

    Aigunas especies a emplear en la reforestaci6n, como el arrayân (Myrcianthesferreyrae) tienen también un gran valor alimenticio, pues sus agradables frutos soncomestibles y apreciados por los habitantes de las Lomas de Atiquipa y Taimara, dedonde es endémica esta especie; ademas, los frutos también se emplean para laconfecci6n de mermeladas y licores.

    En Collanac (Peru) se desarrolla desde 1993 un proyecto de captaci6n de nie-blas para apoyo agroforestal. En este caso, el agua capturada se emplea para laobtenci6n de un fruto denominado tuna, que proporciona una especie de cactus(Opuntia ficus-indica), y que los habitantes comercializan dado el elevado interésnutricional, dei fruto, coma forrajero, de sus tallos 0 cladodios. Ademas, este cactusse usa como base para el cultivo de la cochinilla (Dactylopius coccus) que propor-ciona el carmin, pigmento natural usado en la industria alimentaria, textil y farma-ceutica, deI cual Peru es el principal productor mundial. También con este proyectose plantan arbustos de tara para reforestar la desértica zona (Schemenauer,2008).

    Cuando las plantaciones se realizan pensando en su utilidad silvo-pastoral,debemos elegir especies de buen vaJor bromatol6gico, como algunas leguminosas(Parkinsonia aculeata, Prosopis tamarugo, Atriplex nummularia, etc.), que constitu-yen el unico alimento de algunos rebaiios en lugares coma Gabo Verde y en Chile.

    Experiencias de capturas de nieblas en zonas aridas y semiaridas 73

  • 74 Introduccion a la captacion de las precipitaciones horizontales y de las escorrentfas

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