Obra protegida por direitos de autor · aI trabajo, a la naturaleza, a los dioses, cantos de un ceremonial, mani ... EI iam, designador dei tiempo causante dei deterioro dei cuerpo,

Obra protegida por direitos de autor

" A RETORICA

GRECO-LATINA E A SUA PERENIDADE


(Página deixada propositadamente em branco)


" A RETORICA

GRECO-LATINA E A SUA PERENIDADE

ACTAS DO CONGRESSO INSTITUTO DE ESTUDOS CLÁSSICOS FACULDADE DE LETRAS

UNIVERSIDADE DE COIMBRA

11 a 14 de Março de 1997

COORDENADOR: JOSÉ RIBEIRO FERREIRA

II VOLUME

• ~ FUNDAÇÃO ENG. ANTÓNIO DE ALMEIDA


(Página deixada propositadamente em branco)


LUCIANA SPARISCI

Universidad de Cosia Rica

LOS RECURSOS RETÓRICOS DE LOS CARMINA BURANA

(Ilustración de la temática. La conferencia tiene como intención

demostrar la perfecta coincidencia de la retórica clásica y de las teorÍas de la comunicación contemporáneas: con miras a la persuasión y a la adhesión, los teóricos de la argumentación e1aboran estructuras lingüís-ticas, figuras literarias, estrategias discursivas. Es la construcción de la red retórica de la comunicación, cuyos códigos se resaltarán en los Carmina Burana, con particular referencia aI de la modalidad y de las estrategias: QUOMODO y QUIBUS AUXILIIS).

"AUDIENTES AUDIANT. .. " (218): el ceremonial de los goliardos y de los clerici vagantes rompe e1 silencio de las callejuelas y plazas medi-evales con la exhortación a un acto de escucha, el cual implica auto-máticamente un acto de habla. "Audientes audiant ... " Este exordio es una hábil construcción de sílabas rítmicas, adecuada para la captatio

benevolentiae: hay un quid por transmitir, un quid por escuchar. Un mensaje canoro más de los Carmina Burana, unos versos poéticos más

construidos para el oído antes que para la lectura. EI propósito de los autores - cantores de esta peculiar forma lite-

raria es la transmisión inmediata deI quid, es un acto de enunciación el

cual, como todo proceso integrado de comunicación, requiere deI emi-

sor (QUIS), deI mensaje (QUID) y dei destinatario (QUIBUS) y cuyos

in: Congresso - A &ló,ica w~co-Lalina e a ma Perenidade (Coimbra, 11-14 de Março, 1997) . José Ribeiro Ferreira (coord.). Edição da Fundação Eng. António de Almeida, Porto, 2000, 11 Vol., pp. 487-495.


488 LUCIANA SI'ARJSCI

códigos Y subcódigos se circunscriben en los planos de la denotación y

de la connotación. Dn acto público, entonces, el cual se celebra en esa

manera sugestiva de peregrinaciones sonoras, que pretenden difundir

cantando "la otra voz", la otra verdad, diferente de la oficial, la cual no

canta, habla y legisla, aI ritmo de la prosa deI poder político.

Y esta voz diferente no puede ser solitaria ni individual: en la

puesta en escena de los Carmina Burana la actuación necesita el ego, el

tú, el nos, el vos, "iocus est generalis". En este juego deI decir, todos tie-nen que participar "Lude, ludat, ludite". Los que saben tienen que

hablar: "Vos qui scitis, dicite", y todos deben cantar por igual, sin ambi-

güedad, con voz clara; la cítara dará la melodía a las palabras y juntos

los sodales marcarán un ritmo para esta celebración colectiva:

"Circumgyrantes canite concorditer!

pedem pedi committite hilariter

congaudentes iubilo, concrepando manuum cum plausibus!"

EI canto 165, casi una fiesta de Venus, complementa la descripción

deI ceremonial de los Carmina Burana en lo relativo a la mímica y aI

lenguaje gestual, deseo, canto y ritmo aI unísono. Ficción literaria, literatura espontánea, protesta en versos, fenó-

meno literario: no quisiera agregar una opinión más a las múltiples interpretaciones deI quid y deI cur, que giran sobre la sistematización

de unos tópicos originales, no tanto por su naturaleza, sino por el tra-

tamiento y la estructura de su elaboración en un contexto histórico e

ideológico muy analizado.

Quiero referirme a algunos aspectos específicos deI quomodo y qui-bus auxiliis, entendidos como recursos de la red retórica de esta parti-

cular práctica literaria, elaborada para la oralidad.

Bajtín parece ofrecer el marco ideal para el ritual literario de los

Carmina Burana en las situaciones espacio-temporales: su carnaval es el

"ludus" de los clérigos y goliardos, con la plaza pública, las tabernas, el

festival deI vino, la domus Veneris, la evocación, la celebración de lo

grotesco, las imágenes de un mundo aI revés, el disfraz. Ansiedad e

intensidad de vida, sucesión de experiencias sufridas o anoradas: ficción

o realidad en la búsqueda del "locus amoenus", meta de esa peregrina-

ción de los vagantes.

Companero o pretexto de la peregrinación, el canto, como en las

primitivas manifestaciones expresivas deI alma itálica: los cantos aI amor,


LOS RECURSOS RETÓRICOS DE LOS CARMI:-.IA BURA.'JA 489

aI trabajo, a la naturaleza, a los dioses, cantos de un ceremonial, mani-

festación lingüística arcaica de una búsqueda primitiva de afirmación de

la identidad latina. Ya desde entonces, los recursos retóricos evidencian

en la lengua rudimentaria deI carmen Arvale, la emotividad de la sinta-

xis expresiva-impresiva: el vocativo, el imperativo, la interjección y

exclamación, evidentemente provocan desde lo remoto una fuerte suges-

tión y compenetración en los agrestes espectadores latinos, partícipes de

ese ceremonial en el cual los fratres arvales cantaban marcando el ritmo

en cadencia.

"En os, Lases iuvate

Enos, Marmor, iuvato

Triumpe triumpe triumpe ... "

El poder de la asonancia y de la onomatopeya, uniendo las moda-

lidades de la invocación y deI imperativo, responde, en ese momento, a

una retórica espontáneamente impresiva que dirige la fuerza mágica de

la palabra ritual, dispuesta en los rudos versos deI Saturnio para consa-

grar arque tipos universales .

Los clérigos y goliardos, vates e110s también, han heredado todo el

poder de la retórica de la tradición greco-latina: arte o artificio es el

legado de las leyes de electio y compositio de las verba, de la creación

de figuras de palabra, sintaxis y pensamiento. Como la elaboración de

los tópicos, los recursos retóricos también se procesan con deleite, en

ese típico "ludus" sensorial de las palabras y de las ideas de los Carmina

Burana, en cuyo discurso se oponen y subyacen lo sagrado y lo profano,

lo real y lo imaginario, lo ético y lo patético, lo serio y lo cómico.

Si lo sensorial es el matiz de esta literatura, es consecuente y cohe-

rente la escogencia de los recursos retóricos que permiten, o por lo

menos presuponen, provocar el mayor grado de adhesión a su mensaje,

utilizando aquellos mecanismos que, por tradición, ejercen más fuerza

de persuasión: en particular las funciones referencial, expresiva e impre-

siva. Los deícticos, el vocativo, la exclamación e inteIjección y el impe-

rativo con el subjuntivo exhortativo se evidencian en la enunciación de

los Carmina Burana como esos recursos retóricos deI quomodo y qui-

bus auxiliis que rigen esa práctica literaria de la oralidad.

En el orden presentado, sobre la base de la interferencia intenci-

onal debida a la gran carga afectiva y efectista, trataré de ilustrar su cons-

trucción y su función.


490 LUCIA.'JA SPARISCI

Deícticos

La exaltación de Bacco es notoria: es la imago dei poder de la

transformación operada por el vino, es dios presente en las tabernas,

motor de renovación. La argumentación es coherente en su concele-

bración:

Tu das, Bacche, ... tu comprimis

tu rumpis ...

Ergo bibamus. (201)

La insistencia dei tu, en la figura de la reiteración, busca la com-

probación dei poder de Bacco, ergo es consecuente el bibamus.

EI proceder de la edad que debilita la fuerza amatoria es motivo

de ansiedad constante que se convierte en un ludus elegíaco en el cual

los deícticos marcan el paso inexorable dei tiempo:

Iam aetas invaluit,

iam amor incaluit;

iam virgo maturuit...

Ergo iunctis mentibus

iungamur corporibus! (167)

EI iam, designador dei tiempo causante dei deterioro dei cuerpo,

justifica la dialéctica ilativa dei ergo iungamur corporibus.

EI canto 60 expresa toda la lamentación de un profundo amor,

causa de sufrimientos injustos:

Captus amore gravi ... ,

quam patimur indebite!

EI clérigo o el goliardo designa su situación can una variedad de

deícticos pronominales y adverbiales que evidencian su conflicto amo-roso en la relación con su amada, en el lugar y el tiempo precisos:

procul - hinc - ecce - tibi - te - dum - me - eam - inde -

iam - illic - hic: la red de partículas deícticas en secuencia debida-

mente acentuadas, resaltan enfáticamente el proceso conflictual dei ena-

moramiento en sus etapas de contrastes y confrontación.

EI deíctico, a principio de verso, es un exordio de gran fuerza

enunciativa; sumado a la asonancia, imprime ai mensaje una marcada


612 EDUARDO OTERO PEREIRA

superlativos y de interrogaciones retóricas, etc, vemos cómo la oratoria ha evolucionado, desarrollando géneros como el dei panegírico, en res-

puesta a un poder cada vez más absoluto dei emperador fundamentado

en relaciones genealógicas con héroes clásicos y un culto a su figura que

desde Julio César ha ido fortaleciéndose haste desembocar en el domi-

natus, es decir, en la creencia dei emperador como dueiío sobrenatural

dei universo.


PAULA BARATA DIAS

Universidade dos Açores

A RETÓRICA CLÁSSICA E A HOMILÉTICA CRISTÃ

Comprehendam sapientes in astutia eorum (Job 5, 13)

Pela necessária inserção num meio e numa cultura urbana já defi-nidos, pela sua natureza de religião semita, pelas necessidades pragmá-

ticas da propagação da fé, a pregação cristã não podia deixar de utili-zar os recursos técnicos e formais oferecidos pela retórica clássica: os esquemas formais, o desenvolvimento da argumentação, os recursos esti-lísticos, a pragmática, foram fundamentais na fixação de uma retórica cristã. As duas aproximam-se na frequência da mesma escola, na leitura dos mesmos modelos, e mesmo na identidade dos seus protagonistas. Curiosamente, a homilética cristã, ou seja a "teoria da pregação"; ou a "retórica explícita das homilias", adopta uma posição de intencional recusa da cultura profana, negando em teoria aquilo que desde cedo se aplicava na prática sermonística 1: a sedução pela palavra. Como expli-

car esta atitude contraditória? Nesta comunicação pretendemos mostrar que desde cedo os auto-

res cristãos meditaram sobre o fenómeno da pregação, fixando para o

acto de pregar regras mais ou menos rígidas; que esta teorização sobre

1 Entendemos por homilética ou por sermOnIstlca o conceito definido por A. OLIVAR, in La Predicación cristiana Antigua, Herder, Barcelona, 1991, o estudo e a teorização feita sobre o acto de pregar que decorre durante o culto ou durante a ocasião de evangelizar, ou seja, sobre os textos conhecidos como homilias.

in: Congresso - A Retórica GI~C()Latina e a sua Perenidade (Coimbra, ]).]4 de Março, 1997) . José Ribeiro Ferreira (coord.) . Edição da Fundação Eng. António de Almeida, Porto, 2000, II Vol. , pp. 61~629.


614 PAULA BARATA DIAS

o acto homilético se orienta no sentido de fixar, no início, uma retórica

da anti-retórica, atitude que evolui para um progressivo reconhecimento

da obrigação de "instrumentalizar" a humana sapientia, utilizada como um meio para atingir o fim maior que é: a educação na fé. Tal posição terá, como consequência, ao nível do texto - nas homilias - o conhe-

cimento implícito e a absorção tácita do legado da retórica pagã, utili-

zada desde os tempos primitivos do cristianismo.

O cristianismo é conhecido como "a religião do livro". Para esta classificação concorre o facto de se tratar de uma religião revelada aos homens através da palavra e fixada num livro sagrado como marco essencial de fé - a Bíblia; e oral, através da pregação das verdades da

fé, e através da liturgia cristã, assente na meditação dos textos divinos. Desde cedo no discurso cristão se revelou o imperativo, a obrigatorie-dade de "anunciar a Boa Nova" - euayyeÀ{SelV: narrar como testemu-

nhas os acontecimentos presenciados, ensinar a fé, anunciar o Reino,

perdoar os pecados 2 - por exemplo, em Mc 16, 15; 17:

Et dixit eis: euntes in rnundurn uniuersurn praedicate Euangeliurn ornni

creaturae (. .. ) linguis loquentur nouis 3

Tal facto foi essencial para o cristianismo primitivo, e, obviamente, a intencionalidade de a pregação apostólica cristã ser conduzida segundo um método que geria os meios, os fins, e o público a atingir

2 A. G. KENNEDY, A new history of classical Rhetoric, Princeton University Press, 1994 (1928), p. 257: " ... judaism and its derivatives, christianity and islam, are speech-based religions to a much greater extent than greco-roman paganism ... " Diz este autor ainda que o acto da criação divina descrito por estes três livros é um acto perlocutivo. Acrescentaremos nós, a esta oposição entre religiões pagãs e semitas, a própria relação entre a divindade e os fiéis, que modifica automaticamente o papel da comunicação nas manifestações religiosas: no paganismo, uma classe sacerdotal encarregava-se dos rituais propiciatórios, secretos à maioria das pessoas; com as reli-giões mistéricas há um maior compromisso e envolvimento entre o fiel e a divindade, mas não há a ânsia da conversão universal que animou o cristianismo.

3 Para o Latim, utilizámos a edição BIBLlA WLGATA, Colunga-Turrado eds, BAC, Madrid, 19949. Para o Grego, usámos NoWM TESTAMENTVM GRAECE, Nestle-Aland eds, Deutsche Bibelgesellschaft, Stuttgart, 199427 . Nas traduções das citações bíblicas e no uso das abreviaturas, socorremo-nos da edição portuguesa da BIBLlA SAGRADA, Difusora Bíblica, Lisboa, 198411 . O verbo grego traduzido por praedicaTe é KT]pÚ~U1:E. Cf. Mt 28, 19, o passo equivalente: euntes eTgo docete (J1af}rrrsúuar:s) omnes gentes: bap-tizantes eos in nomine Pahis et Filii et Spiritus Sancti. Lucas e João não possuem uma referência tão li teral à obrigatoriedade da pregação. Ela existe, mas a um nível mais simbólico como em (add.) Lc 24, 48: Vos autem testes estis horum (~Ó.p"tUPE

A RETÓRlCA CLÁSSICA E A HOMILÉTICA CRlSTÃ 615

verificou-se precocemente: assim, a apologia da fé cristã é feita diferen-

temente, conforme o auditório é judeu - aumentando neste caso as

provas baseadas nas Escrituras - exemplo paradigmático é o discurso

de Paulo aos judeus - ou não judeu, como no caso da pregação de Pedro diante de Cornélio e sua família, ou de Paulo no areópago, nos

quais se acentuam o carácter universal e salvífico, a promessa de frater-nidade do cristianismo 4.

É interessante verificar que uma das primeiras manifestações do Espírito Santo nos apóstolos foi a glossolalia, o dom de falar várias lín-

guas, associado à coragem súbita para proclamar a fé às multidões. No

entanto, a capacidade da pregação, e a consequente exploração de pro-cessos retóricos, é dada aos apóstolos como um dom do Espírito, e não como produto da educação e treino do orador, como na retórica clás-

sica 5. Em Mc 13, 11 surge expressamente referido que a pregação é uma dádiva do Espírito:

... et eum duxerint uos tradentes, nolite praeeogitare quid loquamini sed quod

datum uobis fuerit in illa hora, id loquamini: non enim uos estis loquentis, sed

Spiritus Sanetus ...

Estes versículos encerram a novidade da pregação cristã em relação

a qualquer acto de eloquência profana: a pregação surge como uma acção verbal didáctica, simultaneamente instrutiva e moralizadora, mas

inspirada pelo Espírito Santo, e não como resultado de um processo de esforço humano. O pregador cristão não falava em nome de si próprio,

nem se apresentava como um filósofo, daqueles que enxameavam as

cidades orientais dos alvores do milénio. Sofria uma iniciação sacramen-

tal - a descida do Espírito, o baptismo - que o autorizava a ser media-

neiro da revelação cristã. Paulo resumiu este processo que autorizava o

4 Respectivamente, Act 13, 16-43; Act 10, 4; Act 17, 19-3l. 5 O Espírito Santo desce sobre os apóstolos sob a forma de "línguas de fogo",

Act 2, 3 linguae tanquam ignis, yÀWcrcrUl WcrEl 1tUpÔç - a língua é um orgão essencial para actividade verbal - será a forma (e lembramo-nos das representações icono-gráficas do Pentecostes, em que cai sobre sobre os apóstolos uma forma alongada, como uma "língua"), ou a capacidade verbal o que se pretende realçar? A escolha do termo "língua" como forma visível da manifestação do Espírito não nos parece inocente. A. OLIVAR, op. cito p. 38: "La novedad de la predicación cristiana reside sobre todo en la objectividad dei mensaje evangélico. El predicador cristiano primi-tivo no hablaba en nombre de sí mismo, ni se presentaba como un filósofo ordina-rio, un filantropo que proponía un sistema especial de perfección individual o de convivencia social. Se presentava como ejerciendo um sacerdócio ... "



apóstolo de Cristo a ser um "demiurgo da Graça" nas palavras lapidares

de Gal 19, 20: vivo autem iam non ego, uiuit uero in me Christus. A mensa-

gem a ser proclamada era também de uma extrema singeleza e objecti-vidade: "Cristo é o Messias prometido no AT, mudai o vosso comporta-

mento em função da revelação cristã e da promessa de um novo reino".

Num resumo bastante simplificado, assim se apresenta a estrutura dos variados momentos de pregação apostólica nos Actos dos Apóstolos.

A pregação cristã continua uma tradição judaica: herdou o AT, base da religião judaico-cristã, e o momento ritual da meditação e explicação da palavra divina - a assembleia comunitária reunida para prestar culto.

Assim, quando Cristo prega no Templo de Jerusalém, ele cita passagens do profeta Isaías e dos Salmos, aplicando a si próprio as palavras do pro-feta através da parábola dos vinhateiros 6. Este episódio do NT apresenta

uma realidade que se tornará comum na pregação: a narração dos fac-tos históricos da revelação cristã fazia-se acompanhar da interpretação do

AT como argumento probatório, prefigurativo do futuro destino cristão. Esta ligação entre o judaísmo e o cristianismo não se verifica apenas ao nível da revelação teológica: do ponto de vista formal, a cultura judaica fixada no AT foi uma base sobre a qual se apoiou o cristianismo, e foi interpretada num discurso hermenêutico, já praticado pelos judeus, mas enriquecido no cristianismo pela revelação de Cristo como o Messias.

A cultura judaica influenciadora do NT encontrava-se, nesta fase da História, bastante contaminada pela cultura helénica 7. Basta-nos referir

que os termos relativos ao acto de "proclamar a fé" são gregos, e eram já utilizados pela Antiguidade pagã, sobretudo na linguagem filosófica.: Homilia é uma transliteração do grego Óllt/du "reunião, assembleia, con-versação", utilizado pelos primeiros cristãos com o sentido de "instrução

pastoral" 8. A6yoc" "discurso", também seria utilizado para designar o

acto de "conversar sobre a fé", bem como KU-ClÍX1Jcrtc" do verbo KU-C1JXtCO. Teriam, como sinónimos de raíz latina, os termos sermo, eloquio, commu-

6 Mc 12, 10, Mc 6, 1-2, Mt 13, 54. Jesus começa a ensinar na sinagoga (dacere, OIOÚcrKEIV). Também nos Actos do Apóstolos vemos que pregar nas sinagogas era um hábito enraizado na vida religiosa judaica. O que irritava os judeus não era o acto, ou a circunstância da pregação, mas sim o conteúdo desta (vide por exemplo, Act 13, 16-43.

7 Por exemplo, o género apocalíptico era próprio da cultura judaica. Veja-se o 2Mac, redigido em grego. Este género também foi cultivado pelos cristãos, nome-adamente no livro que fecha o NT, o Apoc. de S. João. Em grego foi também redi-gida a maior parte dos livros do NT.

8 ÓIlIÂ:lÍcrac;, Act 20, 11, referindo-se à pregação de Paulo: o mesmo passo é tra-duzido em Latim pelo verbo laquar (allacutus).


A RETÓRICA CLÁSSICA E A HOMILÉTICA CRISTÃ 617

nicatio, praedicatio, conuersatio, admonitio, commonitio, exhortatio, utilizados

em contexto cristão muito antes de a transliteração latina do termo

se instalar: homilia só se documenta na literatura cristã no séc. IV, em

S. Jerónimo. O verbo grego ÓlltÀÉCO não foi transliterado em Latim, mas

os verbos clássicos tractare, communicare, conuersare, admonere, commonere, praedicare, exhortare 'Juntar, reunir em assembleia; lembrar; proclamar ou

pregar" adquirem o valor de seus sinónimos ou de especificadores: com-municare para a narração; admonere para o discurso admoestativo, conuer-

sare para o discurso exegético ou explicativo, praedicare e exhortare para o discurso exortativo 9. A variedade de termos, cedo instalada, reflecte

justamente a consciência de que a pregação como imperativo cristão

obedece a regras e está condicionada pelo destinatário e pelo contexto lato que motiva o acto homilético - em suma, muito precocemente se definem os sub-géneros literários da homilia:

Coimus ad liUemrum diuinarum commemomtionem, si quid pmesentium

temporum qualitas aut promonere cogit aut recognoscere. Certe fidem sanctis

uocibus pascimus, spem dirigimus, fiduciam figimus, disciplinam pmeceptorum

nihilominus inculcationibus densamus. Ibidem etiam exhortationes, castigationes et censum diuina 10

Tertuliano, Apologeticum, XXXIX, 3-4, CC I, p. ISO.

Fiéis a uma religião de carisma universal, os cristãos nunca se iso-

laram do século que teoricamente combatiam. Afirmou H. L MARROU 11,

9 Vide, em A. OLIVAR, op. cit., pp. 487-514, "La terminología y la clasificación de los sermones". São verbos de utilização frequente na cultura retórica pré-cristã. Uma breve consulta ao GAFFIOT e ao LEWIS AND SCHORT prova, por exemplo, que todos eles aparecem em Cícero. O facto de o latim e o grego utilizarem indiscriminada-mente os mesmos termos para designar o acto de falar em público, quer na cultura pagã quer na cultura cristã são indício de que há uma continuidade formal entre a tradição retórica clássica e a cristã. Cf. a definição de Homilia segundo A. OLIVAR, op. cit., p. 31: "Transmisión oral dei mensaje christiano en los diferentes aspectos que ésta revistió en los seis o siete primeros siglos de la era christiana: la proclamación y la explicación de la palavra de Dios, a las que regularmente iban unidas las exhor-taciones a aceptar este mensaje y a serle fiel".

10 "Reunimo-nos para recordar as sagradas Escrituras, se porventura as cir-cunstâncias do momento em questão obrigam a reflectir ou a advertir algo. Em todo o caso, alimentamos a fé de sagradas palavras, elevamos a esperança, consolidamos a confiança, e não menos aprofundamos a obediência aos mandamentos. Nessa altura têm lugar as exortações, as correcções, as admoestações divinas .. . " (trad. prop.)

11 H . I. MARROU, Histoire de l'Éducation dans l'Antiquité, t. 2, Seuil, Paris, 1981 (1948) pp. 127-147 "Le christianisme et l'éducation classique", p. 134: "Or si l'édu-cation classique représentait une technique admirable pour la formation d'un type humain parfaitement développé, pourquoi, inutilement, chercher ailleurs, élaborer un autre systême d'éducation?".



a este propósito, que a juventude cristã e pagã fazia os seus estudos esco-

lares nas mesmas intituições de ensino. Até muito tarde o cristianismo

não desenvolveu escolas que lhe fossem exclusivas, e quando o fez, res-

pondeu apenas às contingências impostas pelo imperador Juliano, em 362, que proibiu os cristãos de frequentarem e de ensinarem nas esco-

las oficiais. Cabia à família e à comunidade paroquial complementar a

educação humana do jovem cristão com o ensino da fé. Por exemplo, no séc. II, desenvolver-se-á no Oriente uma escola de estudos superiores de teologia e exegese cristã, a Didascaleia: Justino Mártir, Orígenes e Eusébio de Alexandria são autores cristãos profundamente contamina-dos pelas correntes filosóficas da Antiguidade, nomeadamente o plato-nismo. Alguns dos melhores escritores cristãos tiveram por mestres reto-

res pagãos, como J. Crisóstomo, discípulo de Libânio. Por sua vez, Orígenes, S. Agostinho, Dídimo-o-Cego educaram cristãos e pagãos no domínio da retórica como disciplina escolar de um sistema de educação profana. Marrou falará de "osmose cultural" para classificar este fenó-meno de convivência frutuosa entre a cultura profana e a fé cristã. Este fenómeno "osmótico" encontra-se perfeitamente documentado nas pala-

vras que servem de prólogo ao De Doctrina Christian a, de S. Agostinho. O sábio autor, numa atitude de modéstia em relação ao valor da sua

própria obra, adverte os seus leitores de que os que ele ensinara nas escolas do Século não devem procurar no seu tratado "rethorica praecepta. Não por não terem utilidade. Mas, porque, se a têm, devem ser apren-didas noutro lugar":

Primo itaque expectationem legentium, qui forte me putant rethorica datumm

praecepta quae in scholis saecularibus et didici et docui, ista praelocutione cohibeo,

atque ut a me non expectentur, admoneo; non quod nihil habeant utilitatis; sed

quod, si quid habent, seorsum discendum est ... 12

Santo Agostinho, De Doct. Christ. IV, I, 2

Curiosamente, se o cristianismo aceita e se serve dos contributos da

sapientia humana, esparsas vezes tal "osmose" é reconhecida explicita-

mente pelos autores cristãos. MARROU justifica este paradoxo pelo facto

de a influência da cultura pagã na cultura cristã ser tão profunda que

12 SANTO AGOSTINHO, De Doct1ina Christian a, Fr. Balbino Martiíi ed. e trad., BAC, XV, Madrid, 1957, p. 262. Cf. Ibid. IV, III, 4, p. 264, onde refere novamente que os preceitos técnicos da eloquência, tais como os adornos das palavras, devem ser apren-didos em tempo próprio, mas fora da sua obra. Ou seja, a retórica cristã não exclui um processo de educação clássico, mas acrescenta-se a ele, corolando-o.


RETÓRICA E PEDAGOGIA HUMANISTAS: A OBRA DE D . .JERÓNIMO OSÓRIO 741

É esta busca de gravidade e nobreza uma das formas de despertar a atenção para a matéria a tratar, ao mesmo tempo que o autor dá de si uma boa imagem e capta a benevolência do suposto auditório 40.

Após estas explanações gerais, repletas de intencionalidade (253.1--256.60), a que o tema da regnandi libido e suas consequências conduzi-ram o autor, surge o topos do bom rei e do tirano (256.60-258.1). Neste contexto, se evoca a realidade portuguesa (258.1 e sqq.), a integridade dos monarcas lusitanos que lhes valeu a imortalidade. Só agora o autor vai fazer a ligação explícita entre as considerações genéricas do exórdio sobre a ambição de reinar, que perdeu reis e impérios, e o tema cen-tral da obra, que se desenvolve em torno da figura de D. Sebastião.

O género demonstrativo, empregado no elogio do jovem rei (258.15-259.18), vai confundir-se com o género deliberativo, onde a per-suasão já está presente 41, tal como irá acontecer ao longo da confir-mação e refutação.

D. Sebastião é apresentado de acordo com o processo oratório designado por histórico, por seguir a ordem da natureza, que vai das causas aos efeitos 42: as coisas externas e em primeiro lugar o nasci-mento; os progenitores e as qualidades que os distinguem e se transmi-tem por nascimento e pelo exemplo ao jovem rei D. Sebastião, espe-rança de todos; a sua natureza bem dotada, aliada a uma educação perfeita, não hão-de permitir que incorra em extremo algum que o deite a perder, mas hão-de predestiná-lo a ser um grande rei, digno de gló-ria imortal. Assim conclui Osório 43: 'Guiada por estas razões, qualquer pessoa, que não for privada de inteligência, poderá prever que tu não

40 Para imprimir o tom grave e nobre ao exórdio, aconselha Cícero que ele seja semeado de sentenças e revelador da arte, estudo e trabalho do seu autor: De inu., 1, 18.

41 Sobre a interpenetração de géneros num discurso retórico, vide C1cERo., De inu., 2. 32. No que se refere ao deliberativo e ao demonstrativo, cf. C1cERo, De inu., 2. 51-59.

42 Cf. ALESSANDRO L IONARD I, Dialoghi dell'invenzione poetica (1554) in B. WEINBERG, Tmttati cit., III, pp. 221-223.

É este o método que aconselha o autor de Rhet. ad Herenn. 3. 7-8. D. Jerónimo Osório, na apresentação da matéria, ao longo do seu tratado, segue de muito perto a teorização deste passo. Eram estas as regras de invenção que Osório e os huma-nistas em geral tinham de memória, dada a importância que a retórica e designa-damente a retórica ciceroniana ou pseudociceroniana desempenhavam na sua for-mação. Vide supra n. 32.

43 Cf. 259.13-18: His argumentis inductus quilibet homo, qui non fumt mentis expers, potmt coniicere futurum, ut non sis illis regibus annumerandus, quorum exitiales exitus exs-titere: sed illis potius, qui Diuina uirtute nixi, ad summam felicitatem peruenere.


742 NAIR OE NAZARÉ CASTRO SOARES

hás-de figurar entre aqueles reis de quem os desditosos destinos ficaram

na memória, mas antes entre aqueles que, apoiados na virtude divina,

atingiram a suprema felicidade'.

Aqui se insere a dedicatória da obra escrita expressamente para

orientar o jovem D. Sebastião 44: 'Foi realmente esta esperança que me

estimulou a empreender uma grande obra, que, segundo julgo, de

forma alguma te há-de ser desagradável. Porque eu vejo existir em ti, já

nesta idade, o propósito de te elevares em todo o género de virtude

régia e quase divina e porque todas as tuas deliberações, interesses, cui-

dados e pensamentos devem ser dirigidos à glória imorredoira, que

poderia ser-te mais grato do que a diligência e a abnegação daqueles

que, em tarefa de tal monta, desejam ser-te úteis e dedicados?'.

O autor descreve então o enquadramento cénico onde se desen-

rolou o diálogo, a conversa que deu matéria ao seu tratado e apresenta

as diversas personagens.

O exórdio evolui para uma espécie de proposição, onde não falta

o sumário claro e preciso do tema da obra (259.28-32): De regis institu-

tione, officio et dignitate.

Surge o Zocus amoenus como um quadro vivo, do maior colorido, a

quebrar por instantes o tom oratório do discurso (259.32-41).

Através da descrição natural de um encontro entre amigos - em

que surge a conversa em torno de D. Sebastião, ainda menino e enlevo

de todos, que está na origem deste tratado - o autor encontra a oca-

sião propícia para se dirigir directamente ao seu príncipe, destinatário

do seu tratado, com palavras de verdadeira captatio beneuolentiae45 . 'Então

iniciei uma conversa desta natureza, que ofereceu assunto a uma expo-

sição mais longa do que inicialmente imaginava. E desejava excelso prín-

cipe, que, pela tua singular cortesia, a ouvisses atentamente' .

A capta tio beneuoZentiae, recomendada pelos tratados de retórica,

introduzia a divisão e chamava a atenção para os vários aspectos temáti-

cos a tratar, os vários pontos que integrariam a argumentação. Assim

44 Cf. 259. 18-28: Hac equidem spe impulsus sum, ut apus magnum susciperem, quod tibi minime iniucundum f01·e arbitrar. Cum enim tibi iam ista aetate prapositum esse uideam, ut in omni genere regiae, atque prapemodum Diuinae uirtutis exceltas; et omnia consilia, stu-dia, cume, et cogitationes tuae ad sempiternam gloriam conferendae sint; quid tibi gratius esse potmt eorum studio, et uoluntate, qui tibi in re tanta operam, et studium nauare cupiunt?

45 Cf. 260. 2-6: Tunc ego eiusmodi sermonem institui, qui matmam longioris sermonis dedit, quam fore ab initio susPicabar; quem uelim, Princeps amplissime, pro tua singulm1 humanitate, attente audias.


RETÓRICA E PEDAGOGIA HUMANISTAS: A OBRA DE D. JERÓNIMO OSÓRIO 743

apresenta Osório a divisio do seu opus magnum 46: 'Muitas coisas virás a

conhecer acerca dos males das repúblicas, dos remédios com que devem

curar-se esses males, das desgraças que resultam de uma defeituosa e má

educação dos príncipes, da felicidade proveniente da sua instrução e

educação cuidadas, da forma de administrar o império com prudência,

fortaleza e felicidade, do ornamento e grandeza do reino, da aquisição

da glória e imortalidade do nome, dos favores e predicados com que

aquele supremo Rei e Senhor, que governa a natureza inteira, dota aque-

les príncipes, que se entregaram totalmente à sua vontade e exemplo' .

Inicia-se a exposição da matéria (260.19): Sic igitur exorsus. Através

desta expressão é manifesta a preocupação do autor em organizar a sua

inuentio, através da dispositio. Vêm agora a confirmatio e a reJutatio, o corpo

argumentativo da obra. Nelas aplica Osório todas as suas forças e recur-

sos retóricos e estilísticos como meio de persuasão. A escolha de argu-

mentos, a maneira de os tratar, a sua disposição, o seu desenvolvimento

- a ampZificatio oratoria - , a ligação entre eles revelam a arte do ora-

dor. As interrogativas retóricas e as intervenções, por vezes mesmo em

discurso indirecto, das diversas personagens são pretexto para uma expo-

sição longa e diversificada sobre os aspectos que cada proposição pode englobar. Deste modo, sob o ponto de vista formal, salvaguarda-se a uni-

dade da obra. As longas digressões, se é que assim se lhes pode chamar,

não são mais do que o desenvolvimento ou especificação das opiniões das diversas personagens, que o autor introduz em cena, ou uma res-

posta às suas dúvidas, ou um contraponto das suas argumentações.

O plano geral da obra apresentado dentro das normas retóricas,

vai-se cumprindo progressivamente, à medida que o diálogo, quase sem-

pre um monólogo, avança. Neste tratado, confirma tio e reJutatio avançam

a par, processo habitual em retórica, quando a argumentação de um

interveniente na discussão produziu grande efeito.

A terminar o livro VIII delineia-se a peroratio 47. É nesta parte que o autor, com grande sensibilidade artística e discernimento, resume em

46 Cf. 260. 6-19: multa enim cognosces, de Rerumpublicarum uulneribus, de remediis, quibus uulnera curanda sunt, de malis, quae prauam, et corruptam Principum educationem

consequuntur, de felicitate, quae recta Principum disciplina, et institutione comparatur, de impe-rii prudente/; et fortiter, et feliciteI' administrandi ratione, de Regno ornando et amplificando, de gloria, et nominis immortalitate paranda, et de praesidiis et omamentis, quibus summus ille Imperator, et Dominus, qui naturam uniuersam regit, eos Reges afficit, qui sese totos ad illius

studium, et imitationem contulere. 47 Cf. 423.1-547-18.


744 NAIR DE NAZARÉ CASTRO SOARES

poucas palavras o essencial da matéria do tratado e confere à sua argu-mentação uma veemência e espiritualidade capazes de conduzir à per-

suasão a alma e o entendimento dos interlocutores e leitores.

O brilho das figuras, o tom patético, o estilo grandiloquente con-

formam-se para dar um último impulso, um toque final que decida e

mova a vontade livre dos homens e, de modo particular, do príncipe

D. Sebastião.

A organização temática deixa aperceber uma intencional constru-

ção quiástica, centrada em torno de um núcleo, os livros IV e V, que

desenvolvem o tema da educação do príncipe, os princípios que nela

interferem, o seu conteúdo programático, os seus objectivos. Uma ver-

dadeira alternância discursiva entre os livros l-III e os livros VI-VIII se

apercebe no decurso da argumentação: pelo seu carácter probatório, os

três últimos livros do tratado, em que os géneros demonstrativo e deli-

berativo se fundem, são a resposta acabada à temática abordada nos três

primeiros.

A disposição quiástica em volta do motivo central, contidos nos

livros IV e V, é sugerida ainda pela dimensão negativa dos temas dos

livros l-III, que os livros VI-VIII retomam, numa asserção positiva. O pró-

prio autor a cada passo vai referindo nos livros finais da obra, os argu-

mentos a que está a dar resposta, pelo que convida o leitor, de forma

insistente, a fazer a síntese enunciativa dos valores que a argumentação

engloba. A estrutura quiástica evidencia-se a nível do mais pequeno por-

menor, sobretudo entre o livro I - o de maior importância do ponto

de vista estrutural - e a sua réplica definitiva no livro VIII.

O livro I trata da ambição de reinar, dos perigos e trabalhos dos

reis, do bom rei e do tirano e propõe uma educação cavaleiresca, que

dispensa as letras e se apoia na exaltação da glória militar dos antepas-

sados lusos. O livro VIII define, do ponto de vista ontológico e metafí-

sico, a governação, que aproxima o homem de Deus e justifica o desejo

de reinar, apoiado na virtude e na moderação. Assim, a problemática

universal do exórdio - a ambição desmedida do poder e suas conse-

quências desastrosas - adquire, pela razão e virtude, uma dimensão

transcendente, na peroração: só a virtude dá felicidade, pelo que o bom .

rei é mais feliz do que o tirano. Através da sabedoria, que se atinge pela

harmonia da vontade e do intelecto, o homem, príncipe neste caso, é

capaz de se elevar até ao Sumo Bem, ao gozo da felicidade eterna. Esta

é a recompensa do rei-filósofo (557.11-13), formado nas bonae litterae e

favorecido pela graça divina, recompensa da sua pietas. Assim se envol-


RETÓRICA E PEDAGOGIA HUMANISTAS: A OBRA DE D. JERÓ:--.IIMO OSÓRIO 745

via a imagem do príncipe ideal numa auréola de espiritualidade própria

da philosoPhia Christi, que estava de acordo com o final do De republica

de Cícero e da República de Platão.

A acuidade pedagógica e a fina sensibilidade literária de Osório são ainda enriquecidas pelo carácter enunciativo do seu discurso, no que se refere aos seus padrões estéticos. Numa atitude que se adequa ao prin-cípio senequiano de que o estilo define o homem 48, preocupa-se em apresentar o critério que preside à composição das suas obras, em dar a conhecer as suas concepções estilísticas 49: 'Sou daqueles que julgam ridículo recorrer a um estilo elevado para assuntos de pequena impor-tância; mas sou também dos que pensam que é uma indignidade usar um discurso humilde em assuntos da maior gravidade e bem dignos de recriminação [ ... ] Nunca concordei com uma expressão humilde e baixa tanto para os assuntos de maior gravidade como para os de maior abjecção'.

Se a polémica teológico-doutrinária com os humanistas ingleses levou Osório a exprimir claramente as directrizes da sua arte de escre-ver, as considerações que tece a propósito da gramática, da retórica, da dialéctica e da eloquência, ao longo do seu tratado, manifestam bem quanto o triunfo de uma cultura de dominante oratória, característica do Renascimento 50, lançou raízes bem fundas nas concepções e princí-pios estéticos do bispo de Silves.

Nesta obra de Osório, num feliz equilíbrio, reúne-se a preocupação da forma literária e a solidez da inspiração, do conteúdo temático. Além disso, a dialéctica e a retórica, a eloquência estão ao serviço da ideolo-gia 51, numa interligação tão profunda, que à construção retórica se deve

48 Vide supra, n. 9. Osório, no início do livro III do De regis institutione, usa uma expressão de sen-

tido idêntico bem reveladora da crença humanista em que a palavra é o homem: (320.11 -1 3): ln uita igitur, et officio delinquat, opus est, qui in uerbis, et oratione delinquit,

49 Vide H. OSORIl, Opera omnia, I, coI. 1148-1150: Is autem sum qui tragoedias in rebus leuissimis excitari lidiculum arbitrer; in n:bus autem grauissimis et odio dignissimis leni-tate orationis uti facinus indignum putem [. .. } genus dicendi in grauissimis et indignissimis rebus humile et abiectum nunquam probaui.

Estas palavras são dirigidas a Jean MataI, que em carta a Roger Ascham aludira à veemência do discurso de Osório nos ataques que apresentava, no De iustitia, con-tra os protestan teso

50 Vide E. GIl.50N, 'Le message de l'humanisme' in CultUl·e et politique en France á l'époque de l'humanisme et de la Renaissance, Torino, 1974.

51 Vide a este propósito C. VASO LI , La dialettica e la retorica dell'Umanesimo. "Invenzioni" e "metodo" nella cultura del XV e XVI secolo, Milano, 1968, pp. 159 e 240.


746 NAJR DE NAZARÉ CASTRO SOARES

o sentido pregnante da significação e das intenções últimas que a acom-panham. Numa palavra, a retórica e a eloquência estão ao serviço de uma doutrina.

Assim, é intencional nesta obra a repetição de certos aspectos, a insistência em certas virtudes, como por exemplo a grandeza de alma e a temperança, que são os dois esteios basilares ·da moral do estoicismo paneciano do De officiis de Cícero. Aliás, o exemplo que se estende des-mesuradamente em relação aos que são referidos de passagem, é o exer-cício da caça.

Assiste-se a todo um processo heurístico, conducente a uma deter-minada conclusão. É a inuentio do tratado condicionada às conclusões que urge fundamentar para uma perfeita persuasão. Poder-se-ia dizer que o docere e o delectare se encontram ao serviço do mouere.

A lógica do seu discurso, se não lança mão do silogismo perfeito das quaestiones medievais, recorre ao epiquerema, ao entimema como processos argumentativos frequentes 52.

O género demonstrativo, e mais raramente o judicial, apagam-se perante a predominância do deliberativo, que dá relevo à prova, à pro-batio persuasiva. A apresentação dos dados e a forma do discurso são condicionados ao fim da argumentação, que consiste em provocar ou fazer crescer a persuasão. Assim, dá-se um desenvolvimento a cada pro-posição, segundo a sua importância. O estilo rápido - que Osório emprega sobretudo na abordagem dos temas ou na sua conclusão - é favorável ao raciocínio; o estilo lento é criador de emoção 53. Para criar a emoção, indispensáveis são a especificação, a acumulação de porme-nores, que levam à bimembração ou plurimembração frásica 54. E neste particular é Osório um mestre. A acumulação, a enumeração, a reitera-ção desempenham "uma importante função expressiva, superlativando ou hiperbolizando sensações, sentimentos, ideias, acrescentando um novo matiz semântico ao que ficara já expresso" 55.

52 Não poderemos esquecer, no entanto, que Osório, tal como Cícero, recorre aos métodos da retórica, mais do que aos métodos da dialéctica; dá preferência ao discurso contínuo e apoia-se mais sobre o exemplo do que sobre o entimema, que reduz, em certa medida, ao epiquerema. Vide sobre este assunto A. MICHEL, Les rap-ports de la rhétorique et de la philosophie dans l 'oeuvre de Cicéron: l'echerches sur les Jonde-

11lents philosophiques de l'C!1t de persuader, Paris, 1960, pp. 174 e sqq. 53 A este propósito, vide CH. PERELMAN et alii., Traité de l'argu11lentation,

Bruxelles, 21970, p. 194. 54 Ibidem, p. 198. 55 Vide V. M. P. ACUIAR E SILVA, Manei1is11lo e barroco na poesia lírica p01tuguesa,

Coimbra, 1971 , p. 374.


RETÓRICA E PEDAGOGIA HUMAl"lISTAS: A OBRA DE D. JERÓNIMO OSÓRIO 747

A ênfase declamatória destes estilemas é dada através de substanti-

vos, de adjectivos, de verbos, numa sucessão de sintagmas gradativos ou

não, cujo efeito é ainda reforçado, por vezes, pela anáfora de um pro-

nome, ou de uma conjunção ou de uma partícula interrogativa 56.

Não raro a acumulação conduz à correlação do tipo disseminativo-

recolectivo, em que todos os elementos coligidos preparam a mensagem

parenética 57. É este um dos processos caros a Osório e peculiares ao

discurso dos moralistas do tempo.

A própria sintaxe se condiciona à estrutura lógica. A construção

paratáctica é característica das enumerações. A construção hipotáctica,

com longos períodos é a construção argumentativa por excelência e ade-

quada à persuasão 58.

As orações consecutivas encontram-se numa proporção tão grande

no seu discurso, que só uma análise computatorial seria capaz de as ras-

trear com segurança, na sua totalidade 59. Era esta uma das característi-

cas do tom retórico do discurso da época, que deixou as suas marcas

no estilo das línguas vulgares 60.

Uma marca do estilo do autor é o uso de fórmulas quase estereo-

tipadas, que a cada passo se repetem, para introduzir a conclusão lógica

da sua argumentação 61.

56 Vide e.g. 256.31-36; 258.5-10; 266.6-9; 266.33-40; 266.40-48. 57 Vide a definição e exemplificação deste estilema em V. M. P. DE AGUIAR E

SILVA, Maneirismo cit., pp. 363-366. 58 Vide a este propósito CH. PERELMAN et alii., Traité de l'argumentation cit.,

pp. 212-213. 59 Vide no livro I, e .g. 253.13-15; 253.24-28; 253.36 e sqq.; 254.2-5; 254.14-17;

258.49-51; 260.19-23; 261.1 O-lI; 275.23-27. 60 ALEXANDER LORIAN observou a presença frequente de consecutivas nos auto-

res do séc. XVI de língua francesa, facto que atribuiu à influência do latim retórico da época: Tendances stylistiques dans la p'/"ose narrative ji'ançaise au XVI' siecle, Paris, 1973, pp. 58-64; p. 146. Pronuncia-se nestes termos (p. 58): 'Pourtant, ce qui semble cons-tituer la vraie marque distinctive de l'écriture emphatique à la Renaissance, c'est l'emploi de la phrase d'intensité et conséquence'.

61 Construções do tipo accedit ... quod; adiuuat; fit ... ut; adde; unde concludi potest; eueniebat ut; unde persPicitur; reliquum igitur est, unde concluditur, consequens est ut; eue-

niat necesse est. .. ut; unde perspicitur; ita uero factum est ut; restat igitur ut; ... euenire necesse est ut; fieli enim nequit ut (ou nequit enim fim ut ); euenit ut; fim non potest ut; efficitur plane; accidit ut; id eueniet ut; restat ut; necesse profecto est ut etc.

Todas estas fórmulas - e não referimos as que se encontram repetidas, como por exemplo fit .. . ut, retomada inúmeras vezes, são empregadas na primeira metade do livro I.


ÍNDICE

I VOLUME

Comissão de Honra....... ..... ..... ... . .... .. ....... . ...... .......... ... .. .... .... ................. ...... .. .... 7

Comissão Organizadora. .... ....... .. ...... ... .... ... ..... ... .. .. . ...... ............ ... . ..... ......... . ...... 9

Entidade Promotora...... ..... .. ... ... .. .. ..... ..... .. ... .. .... ...... .. ... ..... ............................ .. .. 11

Entidades Patrocinadoras. ..... .. ... .................................. .. .................... .......... .. ... .. 11

Entidades Apoiantes..... .. ... ... .................... ... ................... .. .... ..... ..... .... ....... ... .. ..... 13

Programa ... ...... .......... ..... .. ...... ......... .. .. ... ..... ..... ... ..... .... .... ..... .. .. ...... ... .......... ........ 15

SESSÃO DE ABERTURA

Discurso de Abertura pelo Prof. Doutor José Ribeiro Ferreira.............. ....... 27

Intervenção do Magnífico Reitor.................... .......... .............. .. .... .. . ........ .... ...... 33

COMUNICAÇÕES

M . H. Rocha Pereira

Os caminhos da persuasão na Ilíada .......................... .... ........................... 39

A. López Eire

Innovación y modernidad de la retórica aristotélica................... ............ 57

Manuel Alexandre Júnior

Complementaridade e expansão na retórica helenística ........................ 135

Alain Michel

Rhétorique et philosophie: de Cicéron a nos jours .... ............................ 157


998

M. A. Maria Esther Conejo Aróstegui

EI arte de la persuasion en la poesia lirica griega femenina. ....... ......... 171

Pablo Carcía Castillo

Retórica y filosofia en Platón .. ...... ... ... .. .. ..... .. ... ............ ............... .. .. .. ...... .. 181

Ana Lúcia Amaral Curado

Crónica de costumes femininos num orador ático .. ... .. .. ............ .. ... .. .... . 189

M. a da Penha Campos Fernandes

Sobre a vertente retórico-produtiva da mimese poética em Aristóteles 207

Carmen Soares

O confronto de exércitos em Eurípides: a retórica do extracénico.. .. .. 217

Carlos Ferreira Santos

Elementos retóricos no Héracles de Eurípides: o debate sobre o

arqueiro e o hoplita.. .... .... ............ ... ............ ............. ....... .......... ... .. ........ ..... 227

Marta Váneas

Sophos, to Sophon e SoPhia em As Bacantes de Eurípides .... ... ..... .... ......... . 241

A na Elias Pinheiro

O retrato de Protágoras no diálogo homónimo de Platão .. .. .. ..... .. ... .. .. 253

Colette Nativel

Quintilien, lecteur de Cicéron .......... .. ..................... ..... .. ........... ... ...... .... .. . 265

Antonio M. Seoane Pardo

Retórica y filosofia en tres modelos c\ásicos: Gorgias, Aristóteles,

Cicerón ... ... ........ ... ..... .. ... .... ... ...... .. ...... .... .... ... .......... ..... ... .. .. .... .... . ... . .... .. ... .. . 283

Jesús Luque Moreno

La retórica antigua y la articulación dei lenguaje ......... .. ... ........... .... ...... 305

Ricardo Pinero Moral

La imitación en Dionisio de Halicarnaso: estética y retórica ... ...... .. .. .. .. 325

Concepción López Rodriguez

Retórica, música y crítica literaria en Dionisio de Halicarnaso ............. 335

Nuno Simões Rodrigues

A função do encómio da caracterização de personagens bíblicas em

Flávio Josefo: o exemplo de Saul ... ...... ...... ..................... ... .... ........ ............ 343


999

Rui Miguel de Oliveira Duarte

A paráfrase como exercício preparatório na educação retórica: poten-

cialidades literárias e didácticas...... .... .... .. ... ..... .... .... ..... ...... ....... ... .. .... .. .. .. . 377

Maria Cristina Pimentel

Poesia e propaganda política: metonímia, sinédoque e metáfora nos

Epigramas de Marcial .. ..... ... ......... ............ ...... ....... .... ............ ... .. .. .. .. .. ..... ... ... 409

Ángel Ballesteros Herráez

Retórica y estilo en Tácito: Historiae, 2,76-77. ...... .. .... .. ........... .. .. .. .... .. ..... 421

Belén Trobajo de las Matas

El proemio en la literatura y retórica clásicas y su pervivencia: M. de

Unamuno .... .... .. ..... ... .. .. ......... ...... ........... ............ ...... .. .. ... ....... ......... ...... ..... .. 439

Marília P. Futre Pinheiro

O conceito de diegema (narratio) na retórica antiga e na moderna

crítica literária ... .... .. ... ........ .. .. ............. ..... ....... .. ......... ..... .. ... ... ...... ........ ..... .. 467


1000

II VOLUME

Luciana Sparisci

Los recursos retóricos de los Carmina Burana ......................... .... ........... 487

Henrique Pinto Rema

A retórica em Santo António de Lisboa no contexto português e

europeu da Idade Média. .. .... .. ........ ........ ....... .... ... . ..... . ......... . ..... ... . ..... . ... ... 497

Walter de Medeiros

Retórica do naufrágio e da morte no romance de Petrónio ..... ... ... ...... 519

Delfim Ferreira Leão

Gíton ou a arte da ambiguidade. .. ...... ......... .. ............ ................................ 527

Manuel Guillén de la Nava

EI discurso de Pablo ante ai Areópago (Hechos 17, 22-31): un ejemplo

de la adaptación de la retórica cristiana ai estoicismo ..... . ..... .... ... .. . .... .. 543

Américo da Costa Ramalho

Entre a gramática e a retórica: as Figuras na Gramática Portuguesa de

João de Barros .......................... .............. ...... ... ... ................................. ......... 555

E. Sánchez Salor

EI ritmo en prosa - De Cicerón a EI Brocence.. ... .. ... .... ... ... .. .. .... .... .. ... 569

Eduardo Otem Pereira

La educación en la Antigüedad Tardía: el Panegírico de Eumenio .. .. .. . 593

Paula Barata Dias

A retórica clássica e a homilética cristã .......... ... ..... .... ... ............ .. ...... ...... . 613

Manuel Manas Núnez

Los Topica Ciceronis de Francisco Sánchez EI Brocense .. ... ...... ........ ....... 631

Carlos de Miguel Mora

EI De Oratore de Cicerón como fuente dei De Poeta de Minturno .. .. ..... 645

Margarida Miranda

Teatro jesuítico: Miguel Venegas, dramaturgo e mestre de retórica .... 655

Maria Paula Santos Soares da Silva Lago

Naceo e Amperidónia: função retórica dos fragmentos proemiais ....... 671


1001

Carlota Miranda Urbano

A 'retórica da imaginação ' dos Exercícios EsPirituais de S.1O Inácio

numa oração de sapiência do séc. XVII .... .. .. .. .. .. .. .. ............. .......... ........ .. 685

Jorge A. Osório

O persuasor cristão segundo Erasmo .. .. ... ..... . .... ..... ..... ... . ... ... ...... . .. .. .... .... 697

Sebastião Tavares de Pinho

Aires Barbosa e os seus Cem Exórdios Retóricos .. .. ....... ....... ....... ....... ... ....... 715

Nair de Nazaré Castro Soares

Retórica e pedagogia humanistas: a obra de D. Jerónimo Osório ... .... . 729

Virgínia Soares Pereira

A veia retórica de Inácio de Morais ou os tons ovidianos de um

lnfelix Vates ...... .. .. .. ...... .... ........ ......... .... .............. ....... .. ........ .... ..... ................ . 753

Alejandro Borrego Pérez

La Oratio de lnstituenda Adolescentia deI P. Andrés Rodríguez en e l

contexto inaugural de las c1ases de gramática en Granada .... ... ... ...... ... 771

Maria Micaela Ramon Moreira

A presença das categorias do discurso retórico na construção dos

sonetos de tradição petrarquista .... .. ... .. ,.... ......... ...... ... ........ ........ .... ... .. ... .. 795

Aires Rodeia Pereira

Da retórica clássica à música no Barroco ... ....... ....... .... ........... ....... ... ....... 805

Mafalda Ferin Cunha

Persuadir e deleitar: presença da retórica na Nova Floresta do Padre

Manuel Bernardes .. ........ ....... ....... .... ... ....... .. .. .... .. .. .. ... .... ... .... ....... ........ ....... 813

Maria AParecida Ribeiro

O escritor e o falastrão : retórica e anti-retórica no modernismo bra-

sileiro ... .... ..... ......... .. .... .... ..... ............ ........ ..... .... .... .. ....... .......... .... ... ..... ......... 841

Beatriz Weigert

O Riso em Maria Velho da Costa e Nélida Pinon ...... .. ............... ...... ... ... 855

Carlos Leone

Retórica e oratória nos media .. ..... .. ... ... ....... .. ...... ...... .. ...... ..... .. .. ...... .... ..... . 873

José Esteves Rei

Vestígios da retórica clássica na comunicação social............................... 879


1002

Aníbal Pinto de Castro

Entre Cícero e Aristóteles - A retórica em Portugal, do Renasci-

mento ao Barroco ..... ........ ... .. ..... .. ..... ... .... ........... ...... ... ..... .... ...... ... ...... ...... . 895

Fernando José Bronze

As margens e o rio (da retórica jurídica à metodonomologia) .. ..... ..... . 911

Mário Mesquita

Retóricas da comunicação - Do jornalismo às telecerimónias.. .. .. .... ... 947

SESSÃO DE ENCERRAMENTO

Sebastião Tavares de Pinho

Paenultima uerba ....... .. .... ..... ..... ....... .... .... .... ...... .. ..... ... ..... ....... .... ... ... .. ... ... . 973

António de Almeida Santos

O uso da retórica na vida política e parlamentar .... ......... ...... .... ............ 981


Título: A RETÓRICA GRECO-LATINA E A SUA PERENIDADE TI VOLUME

Coordenação: JOSÉ RIBEIRO FERREIRA

Edição e ©: FUNDAÇÃO ENG. ANTÓNIO DE ALMEIDA

Capa: Roberto Ceolin

Data da edição: Março de 2000

Paginação: José Soares Pinto - Porto

Impressão e acabamento: INOVA, Artes Gráficas

Depósito Legal n.o 149355/00

ISBN 972-8386-31-1


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