Will i Mapu Tierra Del Sur

8/18/2019 Will i Mapu Tierra Del Sur

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Willi Mapu: Tierra del Sur.

Se despertaba noche tras noche con el mismo sueño... Y tras largos minutos de

vigilia, solo, en su cama recordó el viaje onírico que acababa de emprender.

“Se encontraba recorriendo valles precordilleranos, en algún lugar del mundo,

donde llanuras extensas hori!ontales se entrecru!aban generando una amplia visión

geológica del terreno, los "rboles en sentido estricto eran mas bien rami#icaciones que se

al!aban perpendicularmente al suelo proectaban sensaciones de eternidad sabiduría. $l

brillo solar producía matices rosados en el entorno una delicada brisa uni#icaba la

pro#undidad de aquel espacio.

Su paso era tranquilo de ve! en cuando volcaba la vista al movimiento de sus pies

abriendo sus oídos al crujir de sus talones en la tierra, %stos parecían #undirse en la corte!a,

generando un di"logo entre su cuerpo el planeta. &bsorto de aquella realidad no se daba

cuenta que algo se acercaba.

'uando al!ó los ojos vio a un extraño p"jaro de aproximadamente metro medio de

longitud que caminaba erguido, pero con su cuerpo dividido en tres mitades( cabe!a, torso

patas. )odas conservaban una distancia constante entre sí, como si las unieran hilos

invisibles.

Se detienen #rente a #rente con una separación no mas larga que la extensión de su

bra!o el repasa con cautela la maravillosidad de su materia(

Su cabe!a completamente roja irradiaba chispas #ugaces en todas direcciones sus

ojos, esmeraldas es#%ricas, poseían un atraente poder magneti!ante. Sus plumas largas

cristalinas ponían en claro la misticidad que albergaba.


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*a parte media de su organismo era en su totalidad de un color a!ul pro#undo, salvo

en la !ona superior i!quierda donde se hospedaba su cora!ón la que conservaba una

tonalidad púrpura magm"tica.

Sus patas poseían una blancura tal, que re#lejaban como espejos prism"ticos,

delgados raos de sol cegando a sus ojos.

&dvirtió entonces que los latidos de su pecho sincroni!aban con los del ave... $n un

acto re#lejo coge el cuerpo a!ul el resto desaparece ante sus ojos. $l sonido palpitante se

tornó cada ve! mas pro#undo hasta ingresarlo en un estado de trance.

$ntonces notó que era de noche se encontraba #lotando sobre agua #ría, sin

embargo sentía su organismo c"lido #uerte. $l cielo estaba estrellado la luna dejaba ver

claramente alrededor.

Se percató que no estaba solo, había otras personas que nadaban junto a %l,

inmediatamente comprendió su naturale!a ancestral se unió a sus hermanos...

$l traecto #ue largo agotador, pero todos llegaron al t%rmino del a#luente donde

los esperaba el bosque.

Se adentraron sigilosamente por los matorrales, hasta que un disparo quebró el

silencio... *uego se tornó cada ve! mas cerca el aplastante galope de los animales que junto

a los hombres de acero atacaban sin motivo alguno sus raíces...

Sacri#icando sus vidas corrieron a en#rentarse piel contra espada todo se

trans#ormó en un atro! exterminio. +l oía por todos lados los gritos agonía de su pueblo,

luego sintió como el metal atravesaba su estructura rasgaba su carne. $xperimentó la

muerte... Y con lo que le quedaba de conciencia veía #luir la sangre, a trav%s de haces que

proectaba el cuerpo celeste, sobre la tierra que por siglos los había cobijado.


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-espu%s de repasar aquel suceso su mente deliberaba, trastornando su quietud...

Sabía que en su interior estaba la respuesta, pero no podía materiali!ar aquel evento.

ememoró entonces el verano, cuando había seguido el cauce del rio /ío0bío hasta

sus orígenes, desde el mar a la montaña, magia milenaria de torrente sanguíneo0#luvial que

emana generando existencia... Y como en su traecto la realidad aparente de su vida se

tornaba m"s di#usa pugnaba por no ser borrada de la sociedad virtual de la humanidad. *a

humildad sabiduría con la que #ue recibido por los magos que habitaban aquel lugar

habían volcado por completo sus pensamientos se entregó libremente al mani#iesto

energ%tico del #irmamento.

'omprendió entonces que #usionando sus evocaciones con su sueño engendraba el

enlace necesario para mover su voluntad en pos de la emancipación de su pueblo.

1ndujo todo su ser a ingresar otra ve! al estado onírico en este desdoblamiento de

conciencia su vista se nubló sintió su cuerpo como un rompecabe!as cuas pie!as en

#orma individual eran capaces de advertir todas sus emociones.

&l integrarse nuevamente su percepción resurgen los valles anteriores con ellos la

#ascinación armónica del ambiente2 el esp%cimen alado se encontraba en#rente

examin"ndolo detenidamente.

Sin vacilar agarra su cabe!a roja con las manos siente un singular golpe el%ctrico

mientras que al igual que la ve! anterior el resto de su #igura vuelve a desvanecerse. &hora

los ojos hipnoti!antes del ave desencadenan una serie de rel"mpagos que parali!an todos

sus sentidos lo trasladan a trav%s del tiempo el espacio a una nueva dimensión.

&l despabilarse, se halla bajo un bosque mu tupido con "rboles inmensos

majestuosos, lleno de silbidos sublimes e insospechados que se propagan en el entorno,

todo envuelto en un aro crepuscular que se di#unde a trav%s del #ollaje.


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&gudi!ó sus oídos escuchó una melodía que se avecinaba, divisó luego una

multitud de personas que se aproximaban velo!mente apreció en sus rostros una calide!

inexpresable... & pesar de la densidad del lugar sus movimientos eran "giles( 'orrían,

dan!aban, acariciaban todo cuanto se cru!aba a su paso el terreno en un acto

incondicional los protegía de los tropie!os.

Se sumó a la aglomeración de música baile, girando, adentr"ndose en la espesura.

1ba ensimismado, cuando de repente tras los arbustos emerge una descomunal

estructura met"lica que solo %l pareció advertir, a que sus compañeros continuaron el

camino sin modi#icar en gesto alguno su conducta.

3ientras la gente se alejaba, %l se siente imantado por esa red de hierro

acerc"ndose a ella comien!a a trepar su arma!ón. -espu%s de un extenuante ascenso, llega

a la cima de la plata#orma. Su cumbre cubría una amplia super#icie arcillosa rectangular

totalmente desierta... *a soledad le provoca una melancolía ajena se encamina hacia su

borde. 'ontempla entonces, al #ondo del barranco, un largo hilo cristalino que circulaba

dividiendo a la selva por la mitad en sus orillas, aún dan!ando a las personas que a

habían atravesado la arboleda.

*uego oe un atronador ruido a sus espaldas, advierte algo pasmado, como brotan

de la tierra cuerpos desnudos de mujeres hombres que comien!an a tocarse

ardientemente, so#ocando el ambiente con gemidos murmullos de gran poder seductor, en

un consumo desequilibrado de vacía naturale!a. $ntonces empie!an a acercarse

incit"ndolo, hechi!"ndolo llev"ndolo hacia un estado mental anímicamente restringido.

+l pugna por no sucumbir ante el #also sortilegio humano retrocede hasta el #ilo del

abismo, extiende su voluntad hasta el límite en una #racción de segundos repara en lo que

el ave signi#icaba para sí.


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$xperimenta nuevamente el viento acariciar su rostro, sin vacilar extiende sus

bra!os #ormando una cru! se deja caer en la pro#undidad del acantilado...

Sus ojos transportados por las im"genes que como pinceladas abstractas, se

tornaban cada ve! mas reales llegando al #ondo de la depresión, se entregaban al augurio

del destino.

$n este desmoronamiento su cuerpo comien!a a resplandecer casi llegando al

contacto con el líquido, emprende el vuelo... 4ue como si su materia retomara el legado del

universo en un acto de #raternidad le obsequiara la elevación5 Se desprende de su carne

planea junto a sus hermanos que circulaban paralelamente por la orilla de las aguas.

-espierta posteriormente en el margen de una cascada, sólo, desnudo, con las

pupilas bañadas de l"grimas5 *ava su rostro con el #luido del salto recibe la sabiduría

celestial5 'ohesionó pasado, presente #uturo dentro de sí, luego en un pro#undo di"logo

con su alma advierte inocentemente que a no es el mismo.

6ablo &ntonio.

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