La Nada en Hegel Y Heidegger
Francisco Javier Loyola
[email protected] Enrique Saez R.
El siguiente trabajo es una continuacin del anterior. En el
anterior hemos querido contraponer los pensamientos de Hegel,
Heidegger y Parmnides. En la dupla Hegel-Heidegger, hemos visto sus
similitudes y diferencia entre el ser. Y entre la dupla
Hegel-Parmnides vimos la nada entre ambos pensadores. Ahora vamos a
seguir indagando en la ciencia de la lgica de Hegel, y de forma
especial en su concepto de la Nada. Pero lo trataremos de abordar
bajo la mirada de Heidegger y de Hegel, ms bien una crtica o
diferencia existencial de la Nada en Heidegger y del concepto de
Nada en Hegel. En la Introduccin a la Metafsica, Heidegger empieza
haciendo la siguiente pregunta: Por qu es el ente y no ms bien la
nada? Al parecer desde siempre el hombre se ha preguntado ms por la
entidad, por los fenmenos que nos son dados, pero no se ha tomado
el tiempo de preguntarse del por qu nos preguntamos por el ente y
no nos preguntamos por la nada, porque no hay una investigacin
acerca de la nada y solamente nos hemos dedicado a preguntar por el
ente. Como dice Heidegger en introduccin a la metafsica, esta nos
es una pregunta cualquiera Hay muchos que no topan nunca con esta
pregunta, si entendemos este topar no simplemente en el sentido de
escuchar y leer esta frase interrogativa como un mero enunciado,
sino en el de preguntar la pregunta, es decir, formularla,
plantearla, exigirse a s mismo el estado apropiado para este
preguntar [footnoteRef:1] lo que podemos vera ac es que se nos hace
preciso hacer la distincin entre dos preguntas, ya que debemos
preguntar por la nada, y la otra es una pregunta del segundo orden,
porque como dice Heidegger debemos preguntarnos por qu nos
preguntamos ms bien por el ente en vez de la nada. Si bien puede
que nos hagamos est pregunta, esto no es nunca la primera pregunta
en orden temporal, sino que siempre en nuestra existencia nos
preguntamos ms bien por el ente o lo entes en vez de hacernos la
pregunta por la nada. Para Heidegger esta pregunta debe ser la ms
originaria y la ms fundamental, y por ello es la primero pregunta
en otro sentido, no en el sentido temporal, pero bajo otro sentido
que da su profundidad Sin embargo, es la primera pregunta en otro
sentido, a saber, en el de su prioridad. Podemos precisar esta
afirmacin de tres maneras. Definimos la pregunta por qu es el ente
y no ms bien la nada? Como la ms digna, primero, por ser la ms
amplia, luego por ser la ms profunda y finalmente por ser la ms
originaria de todas las preguntas.[footnoteRef:2] Como hemos visto,
esta pregunta es primera en varios sentidos, en el sentido de su
amplitud, en su profundidad y en su originalidad. Con esto podemos
ver que Heidegger adopta que la filosofa es algo que se encuentra
de forma vertical y no horizontal, es decir, las preguntas que se
tiene que hacer la filosofa son verticales debido a la profundidad
que estas tiene y en cmo cada vez debemos ir adentrndonos en esta
profundidad de forma vertical, y no en un preguntar y pensar
horizontalmente. Con aquello, se nos ampla el pensar, vamos cada
vez ms profundos o nos insertamos en la esencia por lo preguntado,
y adoptamos su originalidad. Esta pregunta es la que tiene un mayor
alcance, ya que no slo se pregunta por el ente en su totalidad,
sino que por el ente en su temporalidad, es decir, los entes que ya
fueron y lo entes que estn por venir. Al parecer esta pregunta no
tiene lmite alguno, pero Heidegger dir que s tiene un lmite y esto
es la nada El mbito de esta pregunta slo encuentra sus lmites en lo
que no es en absoluto y en lo que es: en la nada[footnoteRef:3] en
la pregunta se incluye a todos los entes y tambin la nada. Es por
ello que es la pregunta ms amplia. [1: Cfr. de M. Heidegger,
introduccin a la metafsica, gedisa, Barcelona, 1993. Pg. 11.] [2:
Ibd. Pg. 12. ] [3: Ibd. Pg. 12. ]
La pregunta es la ms profunda porque no pregunta por tal o cual
ente, sino que pregunta por el fundamento del ente en su totalidad,
por su existencia, lo cuestionada est relacionado con el fondo.
Pero este fondo debe ser lo fundamental, lo fundador, lo profundo,
de ah que tenga que venir desde el fondo. Es por ello, que la
pregunta trata de encontrar lo que el fondo fundamenta en el ente
existe tal y como es. Esta pregunta trata sobre el fondo, porque
eso es la ms profunda. Ya hemos dicho que esta pregunta es la ms
amplia, profunda, y no queda decir que tambin es la ms originaria.
Cuando pensamos en esta pregunta, nos remontamos al ente en su
totalidad y no a algn ente peculiar y singular, lo hacemos sin
ninguna preferencia. Pero lo que Heidegger dir es que existe un
ente que tiene una primaca por sobre los otros entes y se puede
hacer tal pregunta; este ente es el Dasein, la existencia humana.
Como podemos ir viendo aqu se trata de la primaca que tiene el
Dasein por sobre los otros entes que ya se habla en Ser y Tiempo,
debido a que este este se puede hacer la formulacin de la pregunta
por los dems entes y por su misma entidad, para tambin hacerse la
pregunta primordial de la metafsica que es la pregunta por el ser (
die frage nach dem sein). Es por ello, que tan slo un ente se
destaca por sobre los otros para hacerse la pregunta de por qu es
el ente y no ms bien la nada? Este ente es el ser humano mismo, o
sea, aquel que formula[footnoteRef:4] cuando se dice que formula,
es por la formulacin de la pregunta en cuestin. Pero tambin dir
Heidegger que no debemos tener ninguna primaca entitativa, todos
los entes tienen el mismo valor, incluso la existencia humana no
debera tener un valor ms que otro ente en la pregunta en s, sino
que es el ente que se puede hacer la pregunta. Hemos hecho una
introduccin a nuestro tema de la Nada en Heidegger y la Nada en
Hegel, dando el primer paso con Introduccin a la Metafsica. Con la
pregunta por qu es el ente y no ms bien la nada? Se nos quiere
ampliar la pregunta metafsica, en la cual est inserta el mismo
hombre, ya que el hombre es una ser que se encuentra dentro de
ella, para buscar el fundamento de su existencia a todo lo que da
el existir o el qu es que vendra siendo el ser, pero lo que se
quiere hacer como hemos dicho es ampliar la pregunta, y no
dirigirla a slo lo entitativo, sino que tambin a la Nada que es
nuestro tema en cuestin con los dos filsofos alemanes. Es por esto,
que ahora trataremos el tema de la nada en Heidegger con su escrito
de 1929 titulado Qu es metafsica?[footnoteRef:5] De manera
preliminar podemos decir que al final de este escrito se alude a la
pregunta aludida anteriormente en introduccin a la metafsica que
dice: finalmente, dejar tambin que sigamos siempre en suspenso a
fin de que vuelva a vibrar siempre de nuevo esa pregunta
fundamental de la metafsica, que surge obligada por la propia nada:
por qu hay ente y no ms bien nada?[footnoteRef:6] [4: Ibd. Pg. 12.
] [5: Cfr. De M. Heidegger, Qu es metafsica?, Alianza editorial,
Madrid, 2012. Trad. De Helena Corts y Arturo Leyte. ] [6: Ibd. Pg.
43. ]
Entonces lo que vamos a hacer ahora es analizar el tema de la
nada en su escrito Qu es metafsica? Lo primero que parte diciendo
Heidegger es que la pregunta presupone que vamos a hablar o
esclarecer de qu es la metafsica, pero lo que se har es de poner o
revelar una cuestin metafsica, y a partir de ah se presentar la
posibilidad misma del esclarecimiento de esta. Esto lo realizar a
travs de tres instancias: La primera es el comienzo del despliegue
de un preguntar metafsico, la segunda es elaborar dicha pregunta,
para finalmente dar una respuesta al preguntar. El despliegue es
una caracterizacin previa del preguntar metafsico. Entonces, se
define a que todo preguntar metafsico implica abarcar todo el
problema de la metafsica, o dentro de un preguntar ya estamos
insertos en la metafsica misma. Tambin dentro del preguntar, debe
haber alguien que hace tal o cual pregunta, y ese alguien tambin
est inserto en la metafsica, y se encuentra cuestionado en ella As
pues, toda pregunta metafsica slo puede ser preguntada de tal modo
que aquel que la pregunta- en cuanto tal- est tambin incluido en la
pregunta, es decir, est tambin cuestionado en ella.[footnoteRef:7]
Como he dicho en el anterior trabajo, nosotros creemos que la
esencia de la filosofa es la metafsica. Esto lo encuentro en la
sentencia anterior de Heidegger, ya que la metafsica o el preguntar
metafsico interpela nuestra existencia. Esto es as, ya que al
querer indagar en el ser, necesariamente tenemos que efectuar la
investigacin por nuestra propia existencia. Esto lo podemos ver en
el mismo pensamiento heideggeriano como se puede ver en Ser y
Tiempo, en la analtica existencial del Dasein. Si bien se estudia
el hombre bajo varias ciencias, ya sean social o ciencias
biolgicas, la indagacin de Heidegger es ontolgica, ya que la
ontologa fundamental es la base para llegar a la ontologa general,
es decir, al ser. Ahora bien, Heidegger trata de determinar al
Dasein y la ciencia. Despus de hacer una crtica a la ciencia
moderna, dice que su propia finalidad es atenerse la propio ente.
La ciencia tiene una relacin con el mundo que la obliga a buscar al
ente en su totalidad, es el ente el que define su objeto de
investigacin y la fundamenta. Y vara dependiendo del mbito de la
ciencia, es decir, a la ciencia matemtica le preocupa el ente
matemtico, que podra ser el nmero, a la geometra la lnea, a la
biologa todo ente ser vivo, etc. Y mediante esto se cumple una
aproximacin a la esencia de la cosas, es una aproximacin porque
creemos que lo nico que puede llegar a la esencia de las cosas es
la filosofa. Pero en estricto rigor la ciencia la deja la ltima
palabra al ente que investiga Pero lo sobresaliente de la ciencia
es que, de un modo que les es propio y de manera nica y expresa, le
deja a la cosa misma la primera y ltima palabra[footnoteRef:8] como
hemos dicho, la ciencia tiene una relacin mundana, y est relacin
mundana es con el ente mismo y nada ms. Mejor dicho el hombre de
ciencia y la ciencia slo le interesa al ente y nada ms. [7: Ibd.
Pg. 14. ] [8: Ibd. Pg. 16]
Pero de aqu surge una pregunta fundamental para nuestra
investigacin ya que Heidegger dir: Qu pasa con la nada? Por qu se
dice el entey nada ms? Es preciso decir que la ciencia rechaza a la
nada, dejndola nula. Pero esto tiene una consecuencia, ya que la
ciencia al despreciarla es su investigacin y atenindose al ente, ya
est presuponiendo a la nada, aunque fuera un puro giro de palabras
ya la estamos admitiendo. Pero la ciencia a lo nico que hace
referencia es al ente, es su tema de importancia Frente a eso, la
ciencia tiene que volver a afirmar ahora su seriedad y lucidez: que
lo nico que le importa es lo ente[footnoteRef:9] y la nada le
parece un espanto y una fantasmagora. La ciencia no quiere saber
nada de la nada. Pero una cosa se puede sacar de aqu, y es que la
ciencia cuando quiere explicar su esencia tiene que recurrir a la
nada, ya que cuando se dice que investiga al ente y nada ms, pone y
admite su limitacin de estudio, ya que despus del ente no hay nada.
Pero esto nos tiene que interpelar en nuestra existencia y en el
preguntar metafsico ya que qu pasa con la nada? [9: Ibd. Pg. 18.
]
En la elaboracin de la pregunta, nosotros tenemos que ver la
posibilidad de responder ante tal pregunta y la imposibilidad de
responder por la nada. Pero de lo que se trata este escrito es de
responder qu es la nada? Pero esta pregunta ya es contradictoria es
la pregunta misma y en su posible respuesta, ya que cuando decimos
qu es la nada? Estamos incluyendo el es y si respondemos la nada es
estamos ante la situacin de hacer la nada un ente, lo que es, y
hemos venido diciendo que la nada no es un ente, por lo tanto, dir
Heidegger Pregunta y respuesta son igual de contradictorias en
relacin con la nada[footnoteRef:10] En rigor, no slo no se puede
preguntar qu es la nada, sino que tampoco se la puede pensar, ni en
tono de pregunta ni en ningn otro tono. Por qu? Porque, del mismo
modo como en el qu es? se presupone algo que es, en el pensar se
presupone siempre algo pensado. No se puede pensar en algo que no
es nada, pues eso equivale a no pensar. En definitiva, no est
permitido pensar la nada, sea como sea que se la piense. Pero por
qu no est permitido preguntar qu es la nada, ni pensar la nada de
ningn modo? Quin lo prohbe? La norma fundamental a que suele
adscribir comnmente el pensamiento, el principio de que hay que
evitar la contradiccin, la lgica general, echa por tierra la
pregunta formulada. La cordura siempre defender a la lgica y su
principio de no contradiccin. Esto se puede ver en la filosofa
crtica de Kant, ya que en la crtica de la razn pura en el pargrafo
de la lgica general, uno de los criterios para que un juicio sea
verdadero de modo formal tiene que tener el criterio de la ausencia
de contradiccin. Ahora bien tambin tenemos que decir que la nada es
la negacin de todo ente o el no-ente. Pero al parecer bajo esta
sentencia estamos dejando que la nada sea determinada por la
negatividad y por el no. Heidegger dir que hasta el momento no
sabemos que esto es as, pero de lo que tenemos que estar seguro es
que la nada es ms originaria que el no y la negacin Pero nosotros
afirmamos que la nada es ms originaria que el no y la
negacin[footnoteRef:11] [10: Ibd. Pg. 19. ] [11: Ibd. Pg. 21. ]
Es por ello, que la accin del entendimiento que es la
negatividad y el entendimiento mismo dependen de la nada por su
originalidad. Pero ya que hemos estado hablando de la nada, y si en
verdad la nada no fuera nada, no deberamos seguir escribiendo, ya
que de la nada nada se puede pensar ni decir, recordando a
Parmnides. Para que la nada pueda ser interrogada, ya antes debe
estar dada. Es por esto, que tenemos que encontrarnos con ella.
Pero para encontrarla tenemos que buscar la nada, y lo que se busca
es lo que ya estaba antes dado, nosotros buscamos lo que se nos ha
perdido, pero eso perdido tuvo que en algn momento sernos dado.
Pero para ir adelantndonos en nuestra investigacin, diremos que en
el Dasein se da un estado de nimo que nos conduce a la nada. Este
estado de nimo es la angustia (Angst). La angustia se diferencia
del miedo La angustia es algo fundamentalmente diferente del
miedo[footnoteRef:12] el miedo es siempre miedo por algo
determinado, en cambio la angustia es algo imposible de determinar,
nos angustiamos no por esto o por aquello, sino que nos angustiamos
en la base de una imposibilidad esencial de una determinabilidad.
En la angustia la indeterminacin es ms radical, puesto que la
totalidad de los entes se aleja de nosotros, se hunde, y justamente
en ese alejarse y hundirse nos oprime algo impreciso. En la
angustia uno se siente extrao, La angustia revela a la nada. En la
angustia nos mantenemos en suspenso, ya que ella hace que se nos
escape el ente en totalidad, nos quedamos sin ente que aferrarnos,
no tenemos nada. Inclusive nosotros estamos en medio del ente en la
totalidad, que en la angustia hasta nosotros escapamos, estamos
suspendidos en la nada. Esto tambin se puede ver en la angustia al
modo de Karl Jaspers, ya que es una angustia no en el sentido
meramente del miedo. En alemn tanto angustia como miedo tiene que
ver con la estreches, por lo tanto, podramos decir que en la
angustia a uno se le aprieta el pecho. Tenemos que comprenderlo
como la angustia por el sentido, el miedo es emprico, remite a lo
ente, a aquello que le produce miedo. Como salgo de aquella
situacin, de la nada del sentido. La angustia nos lleva a un
momento ms elevado, nos vamos elevando, porque es una angustia de
ser. Esto es otro modo de ver la angustia pero de cierto modo se
aproxima a la tesis heideggeriana de la angustia como lo que hace
patente a la nada. Incluso en la angustia se puede ver la nada a
travs del lenguaje, ya que la angustia nos deja son palabras, no
podemos expresar nada La angustia nos deja sin palabras. Puesto que
lo ente en su totalidad se escapa y precisamente sa es la manera
como nos acosa la nada, en su presencia enmudece toda pretensin de
decir algo [footnoteRef:13] tambin podemos ver que la angustia como
desvelamiento de la nada nos lo hacemos ver cuando ha pasado la
angustia, ya que usualmente decimos: Eso que me angustiaba, en
verdad no era nada. Por lo tanto, por el estado de nimo de la
angustia se hace patente la nada, en la angustia del Dasein se nos
revela la nada. Es una nada existencial. Es por ello que la nada
debe ser interrogada. [12: Ibd. Pg. 25. ] [13: Ibd. Pg. 27. ]
La respuesta a la nada o a la pregunta por la nada, debe ir en
relacin al ser que somos cada uno de nosotros, al Dasein, ya que
como hemos dicho bajo la angustia se nos revela la nada. Debemos
ahondar en cmo se nos revela la nada como angustia y dejar de lado
las concepciones que no estn en correspondencia con la nada
expuesta hasta aqu. Como hemos dicho la nada nos es ni un ente ni
un objeto, la nada se hace patente en la angustia del Dasein, donde
se le escapa el ente en su totalidad, y no tiene donde aferrarse en
su existir. Pero en la angustia la nada aparece a una con el ente
qu quiere decir esto? Que en la angustia el ente en su totalidad se
vuelve caduco, se agota y queda en nada, pero esto no significa que
la angustia aniquile a la nada, sino que la nada se manifiesta
propiamente con lo ente y en lo ente, por cuanto ste se escapa de
su totalidad. La esencia de la nada es el
Desistimiento[footnoteRef:14] . Esto no significa que sea una
aniquilacin de lo ente ni su negacin, ni mucho menos su suma. Es la
propia nada la que desiste. Esta es la tpica frase en la cual
muchos adversos de Heidegger le suelen tildar como ilusoria, ya que
se dice que la nada nadea. Pero esto significa que la nada que se
apodera de todo, la nada sin la cual los entes no seran los entes
que son, la nada que, en su esencial rechazo, nos remite al ente en
total que se hunde. El desistir de la nada no constituye
propiamente un hacer, sino que ms bien consiste en un rechazar,
pues cuando estamos angustiados y nos enfrentamos a la nada, lo que
ella hace con nosotros no es atraernos hacia s, sino apartarnos de
s, alejarnos. En esto que nos proporciona la nada, nos volvemos
hacia el ente en total, que es el nico modo de alejarnos de la
nada. Y ah, frente al ente en total, nos damos cuenta de que es la
misma nada la que posibilita a los entes, la que nos lleva hacia
ellos. Los entes slo son entes en virtud de la nada, cuestin que se
muestra en el hecho de que para poder ser entes tienen
necesariamente que distinguirse de la nada. Ser ente y no nada es
el rasgo esencial de todo ente, lo que significa que slo son entes
los entes en la medida en que se hallan rodeados nada menos que de
nada; en la medida en que estn, en definitiva, en medio de la nada.
Por eso que el desistir de la nada en algn sentido puede decirse
que coincide con el ser: en ambos casos se trata de aquello que
posibilita la aparicin del ente, es decir, de aquello que sostiene
al ente en cuanto ente y de aquello en virtud de lo cual se
sostiene el hombre en cuanto Dasein. La trascendencia constitutiva
del hombre consiste en que su existencia (y su esencia, que no es
ms que su existencia) se sostiene en algo otro que lo ente. En qu?
En el ser, en la nada. Si esta existencia humana no estuviera
sostenida dentro de la nada, jams podra entrar en relacin con el
ente ni, por tanto, consigo misma La nada es lo que hace posible
carcter de manifiesto de lo ente como tal para el Dasein
humano[footnoteRef:15] . Es cierto que esa nada en la que flota
nuestra existencia rara vez se presenta ante nosotros para que
podamos verla. Cuando lo hace, no es agradable: sentimos un
profundo rechazo que nos remite al ente en total, pero este ente en
total se nos escapa, se hunde en las profundidades de la nada, y la
nada vuelve a estar frente a nosotros, envolvente, omnipresente,
gigantesca, y nos rechaza, y terminamos volvindonos hacia el ente
en total y hacia la nada ininterrumpidamente, en una sucesin que
termina revelndose como simultaneidad: en la angustia nos sale al
paso la nada a una con el ente en total. Para alegra nuestra, se
trata de una situacin poco frecuente. Casi siempre estamos
dedicados al ente; no al ente en total, sino a ste o aqul,
particular, asible incluso. Sin embargo, sabemos que la nada, como
aquello que los sostiene, como aquello que los hace posibles, reina
tanto alrededor de cada uno de nuestros entes singulares como
alrededor del ente en total. Ese alrededor inconmensurable, sin el
cual nuestro mundo no sera, permanece la mayor parte del tiempo
silencioso y encubierto para nosotros. Pero los escondidos ms bien
somos nosotros, quienes preferimos siempre a los entes, sean los
que sean (la vida nos ofrece muchos, por cierto), antes que
levantar la mirada y otear ms all. Entonces, esto significa que la
nada se nos disimula en su originariedad, y esto pasa porque
nosotros nos perdimos en el ente. Esto sucede en nuestro modo de
ser cotidiano, ya que en ella estamos en un constante quehacer con
los entes, tenemos una relacin constante de modo cotidiano con los
entes, y de esta forma le damos la espalda a la nada. [14: En la
traduccin de Xavier Zubiri se dice que la esencia de la nada es el
anonadamiento. ] [15: Ibd. Pg. 32]
Por ltimo tenemos que decir que el hombre al estar inmerso en la
nada sobre el fundamento que es la angustia, es la superacin del
ente en su totalidad, por lo tanto el Dasein es trascendencia. De
ah que podemos decir que el hombre es trascendente porque est
inserto en la metafsica, ya que segn la etimologa de la palabra
griega, esta significa ms all de lo fsico, es decir, es un
trascender, esta ms all de lo ente como tal. Y de este modo la
pregunta por la nada se muestra como una pregunta metafsica. y
terminamos con la siguiente cita para despus entrar en el anlisis
con Hegel Este tosco repaso histrico muestra la nada como concepto
opuesto al autntico ente, es decir, como su negacin. Pero si la
nada se convierte de algn modo en problema, entonces esa relacin de
oposicin no slo experimenta una determinacin ms precisa, sino que
adems surge por fin el autntico planteamiento metafsico que
pregunta por el ser de lo ente. La nada no sigue siendo ya el
opuesto indeterminado de lo ente, sino que se revela como
perteneciente al ser de lo ente.[footnoteRef:16] [16: Ibd. Pg. 39.
]
Si bien en el trabajo anterior hemos tocado a estos dos grandes
pensadores alemanes, lo que hicimos fue verlos bajo el punto del
ser, y la nada la tocamos bajo las perspectivas de Hegel y de
Parmnides. Pero nos hemos visto en la necesidad de hacer la
comparacin con el pensador de la selva negra, ya que creemos que es
una forma nueva de interpretar la nada y darle un sentido distinto
ante el tratamiento de ella en los siglos anteriores, donde como
por ejemplo con el griego Parmnides de la nada, nada se poda decir,
ni menos pensar. Pero tanto con Heidegger y con Hegel existe un
cambio frente el pensar la nada. Con Hegel vemos la identidad entre
el ser y la nada, con Heidegger vemos como la nada se nos hace
patente en la existencia del Dasein, es una nada existencial, que
nos afecta a lo largo de la vida. Haremos un repaso de la nada en
Hegel: NadaNada, la pura nada, es la simple igualdad consigo misma,
el vaco perfecto, la ausencia de determinacin y de contenido; la
indistincin en s misma. En cuanto puede hablarse aqu de un intuir o
pensar, vale como una diferencia el que pueda ser intuido o pensado
algo o nada. Intuir o pensar la nada tiene, pues, un significado;
los dos son distintos, y as la nada est en nuestro intuir o pensar;
o ms bien es el intuir y pensar vacos mismos, y el mismo vaco
intuir o pensar que es el puro ser. La nada es, por lo tanto, la
misma determinacin o ms bien ausencia de determinacin, y con esto
es en general lo mismo que es el puro ser. Hegel lo que est
haciendo es caracterizar la Nada, es la ausencia de determinacin,
es lo indeterminado, lo que no tiene contenido en l, si lo llevamos
dentro de una analoga, estaramos definiendo al ser tambin, que todo
esto es lo mismo que decir ser puro. Con referencia a Heidegger
podemos decir en primer lugar que la nada, es una nada existencial,
pero se pone de manifiesto la igualdad entre la nada de Hegel
cuando se dice que la nada no es algo determinado, ya que tanto
para Heidegger y Hegel la nada es absoluta indeterminacin. En
Heidegger debemos recordad que la nada se revela o des-oculta en la
angustia, y la angustia es distinta al miedo, ya que el miedo es
miedo por o aquel ente, pero la angustia no tiene un determinado
ente, sino que apunta a una nada existencial, donde el ente de la
totalidad es desplazado o caducado cuando la nada desiste. Con ello
podemos ver la igualdad entre la nada indeterminada de Hegel y el
de Heidegger, la nica diferencia es que la nada se hace patente en
un estado de nimo del Dasein, en la existencia del hombre. Esto es
as, ya que la nada no es un objeto, ni menos un ente, pero se nos
manifiesta en nuestro vivir cotidiano. En cambio, en Hegel la nada
es ms bien un concepto, que si bien tiene una relacin con los
entes, al tener la similitud con el ser, en Heidegger podemos
encontrarla de forma ms radical con el ente que se denomina Dasein,
que es la existencia de la cada humano. La similitud importante en
donde se vinculan ambos pensadores entre el ser y la nada, es que
en Heidegger la nada es contraria al ente, al igual que el ser, y
admite el preguntar metafsico por el ser del ente. La nada es lo
que posibilita a los entes, ya que en el anonadamiento o desistir,
es donde el ente se manifiesta de forma originaria con el hombre,
es decir, que la nada ocupa una similitud con el ser, ya que el ser
es lo que des-vela al ente y lo hace ser lo que es, el ser es
aletheia, des-oculta la verdad del ente. Y es ah donde se
manifiesta una coincidencia entre los pensamientos de ambos
filsofos tratados en este trabajo, ya que la nada y el ser tendran
la misma definicin en Hegel y en Heidegger cumplira la misma funcin
que es revelar el ser del ente. Pero como dice Heidegger con una
diferencia As pues, el puro ser y la pura nada son lo mismo. Esta
frase de Hegel {Ciencia de la lgica, libro I, WWIII, p. 74) tiene
toda legitimidad. Ser y nada se pertenecen mutuamente, pero no
porque desde el punto de vista del concepto hegeliano del pensar
coincidan los dos en su indeterminacin e inmediatez, sino porque el
propio ser es finito en su esencia y slo se manifiesta en la
trascendencia de ese Dasein que se mantiene fuera, que se arroja a
la nada[footnoteRef:17]. Ahora bien, en lo que concierne a Hegel y
en Heidegger ellos hacen una indagacin metafsica. Esto es as ya que
en la ciencia de la lgica se investiga de cierta forma por el ser y
la nada, ellos son la unidad ms simple y comparten las mismas
determinacin entre ambas, para as hacer una igualdad entre el ser y
la nada. En el pensador de la selva negra, todo su pensamiento
atraviesa por la pregunta por el ser, Heidegger hace todo su pensar
en vista a la ontologa. Pero lo que resulta ms inesperado en
Heidegger es que en los dos escritos no se lanza de forma inmediata
a dar una respuesta por el ser, es ms, en introduccin a la
metafsica se pregunta de por qu nos preguntamos por el ente y no ms
bien por la nada, y en Qu es metafsica? Adoptamos el tema de la
nada en vez de dirigirnos por el tema del ser. En este mismo
escrito Heidegger dir [footnoteRef:18]Si la pregunta por el ser
como tal es de veras la pregunta que abarca toda la metafsica,
entonces la pregunta por la nada se revela tal que engloba la
totalidad de la metafsica es aqu donde nos hace sentido en
introduccin a la metafsica se plantea que la pregunta Por qu hay
ente y no ms bien nada? Cobra sentido, ya que es una pregunta
profunda, que amplia nuestra visin de la metafsica y que la misma
nada es originaria, por ende su pregunta tambin. Sin duda que estos
dos pensadores alemanes, han pensado lo que otros no han querido
pensar, por una complicacin lgica, ya que dentro de ellas sera una
contradiccin el poder pensar la nada, pero con Hegel y con
Heidegger podemos ver este nuevo tratamiento que se da con la nada,
y es ms, nos invitan a pensar en ella y a poder decir algo, a
diferencia de Parmnides. [17: Ibd. Pg. 39. ] [18: Ibd. Pg. 40.
]
Bibliografa. Gaete. A. La lgica de Hegel, Edicial, Buenos Aires,
1995. Heidegger. M. Ser y Tiempo, Editorial Universitaria,
Santiago, 1997. Trad. De Jorge Eduardo Rivera. Heidegger. M.
Introduccin a la metafsica, gedisa editorial, Barcelona, 1993.
Heidegger. M, Qu es metafsica?, Alianza editorial, Madrid, 2012.
Trad. De Helena Corts y Arturo Leyte. Hegel. G.W.F. La ciencia de
la lgica, Abada editores, Madrid, 2011. Trad. de Felix Duque.
Hegel. G.W.F. Enciclopedia de las ciencias filosficas, Alianza
Editorial, Madrid, 1997. Trad. De Ramn Valls Plana.
