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HIDRÁULICA FLUVIAL: PROCESOS DE EROSIÓN Y SEDIMENTACIÓN, OBRAS DE CONTROL Y GESTIÓN DE RÍOS Hector Daniel Farias, José Daniel Brea, Carlos Marcelo García (Editores) Memorias del Quinto Simposio Regional sobre HIDRÁULICA DE RÍOS Santiago del Estero, Argentina. 2-4 Noviembre de 2011 ISBN 978-987-1780-05-1 (Libro + CD-ROM) SIMULACIÓN HIDRÁULICA DE CONFLUENCIAS Y DIFLUENCIAS, APLICACIÓN AL RÍO LEÓN EN EL URABÁ ANTIOQUEÑO, COLOMBIA Oscar Andrés Duque Marín y Lilian Posada García Universidad Nacional de Colombia, Sede Medellín Dirección: Carrera 80 # 65-223, Medellín, Colombia, Teléfono: (057) 4309000 E-mail: [email protected], [email protected] RESUMEN En este estudio se utiliza el modelo CCHE2D de la Universidad de Mississippi para analizar los procesos de división del flujo líquido y sólido en difluencias y confluencias naturales. Se analizaron los cambios morfológicos debidos a crecientes extremas con diferentes periodos de retorno en tres patrones de flujo dividido – dos difluencias y una confluencia - en el río León, ubicado en el noroccidente Colombiano, en la región llamada “Urabá Antioqueño”. Los casos de estudio se identificaron como León–Sábalo (DS) y León–Tumaradó (DT) y la confluencia Sábalo-León (CS). Se calibró el modelo CCHE2D con datos de campo y se encontró que el modelo se ajusta adecuadamente a la división de caudales líquidos y sólidos medidos. Se corroboran las afirmaciones de H. Bulle (1926) para las dos difluencias analizadas y se encontró que las tasas de transporte sólido se distribuyen en proporciones diferentes a las correspondientes para el caudal líquido. ABSTRACT The CCHE2D simulation model of the University of Mississippi is applied here to analyze the division of water and sediment flow through divided channels as well as natural confluence channels. The morphological changes due to natural high flow events with different return periods are also analyzed by using three study cases in the Leon River, located at the northwestern region of Colombia called “Urabá Antioqueño”. The divided channels of the Leon river are identified as León–Sábalo (DS) and León–Tumaradó (DT); the confluence study case is called Sábalo-León (CS). The CCHE2D model was previously calibrated by using field data. It was found that the model properly reproduced the division of sediments and water according to field observations. The allegations of H. Bulle (1926) for the two divided channel cases were verified and found that solid transport rates are not proportional to liquid rates.

Oscar Andrés Duque Marín y Lilian Posada García

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HIDRÁULICA FLUVIAL: PROCESOS DE EROSIÓN Y SEDIMENTACIÓN, OBRAS DE CONTROL Y GESTIÓN DE RÍOS Hector Daniel Farias, José Daniel Brea, Carlos Marcelo García (Editores)

Memorias del Quinto Simposio Regional sobre HIDRÁULICA DE RÍOS

Santiago del Estero, Argentina. 2-4 Noviembre de 2011 ISBN 978-987-1780-05-1 (Libro + CD-ROM)

SIMULACIÓN HIDRÁULICA DE CONFLUENCIAS Y DIFLUENCIAS, APLICACIÓN AL

RÍO LEÓN EN EL URABÁ ANTIOQUEÑO, COLOMBIA

Oscar Andrés Duque Marín y Lilian Posada García

Universidad Nacional de Colombia, Sede Medellín Dirección: Carrera 80 # 65-223, Medellín, Colombia, Teléfono: (057) 4309000

E-mail: [email protected], [email protected]

RESUMEN En este estudio se utiliza el modelo CCHE2D de la Universidad de Mississippi para analizar los procesos de

división del flujo líquido y sólido en difluencias y confluencias naturales. Se analizaron los cambios

morfológicos debidos a crecientes extremas con diferentes periodos de retorno en tres patrones de flujo dividido

– dos difluencias y una confluencia - en el río León, ubicado en el noroccidente Colombiano, en la región

llamada “Urabá Antioqueño”. Los casos de estudio se identificaron como León–Sábalo (DS) y León–Tumaradó

(DT) y la confluencia Sábalo-León (CS). Se calibró el modelo CCHE2D con datos de campo y se encontró que el

modelo se ajusta adecuadamente a la división de caudales líquidos y sólidos medidos. Se corroboran las

afirmaciones de H. Bulle (1926) para las dos difluencias analizadas y se encontró que las tasas de transporte

sólido se distribuyen en proporciones diferentes a las correspondientes para el caudal líquido.

ABSTRACT

The CCHE2D simulation model of the University of Mississippi is applied here to analyze the division of water

and sediment flow through divided channels as well as natural confluence channels. The morphological changes

due to natural high flow events with different return periods are also analyzed by using three study cases in the

Leon River, located at the northwestern region of Colombia called “Urabá Antioqueño”. The divided channels of

the Leon river are identified as León–Sábalo (DS) and León–Tumaradó (DT); the confluence study case is called

Sábalo-León (CS). The CCHE2D model was previously calibrated by using field data. It was found that the

model properly reproduced the division of sediments and water according to field observations. The allegations

of H. Bulle (1926) for the two divided channel cases were verified and found that solid transport rates are not

proportional to liquid rates.

INTRODUCCIÓN

La cuenca del río León, en el Urabá Antioqueño, ha sido explotada durante décadas para el

desarrollo de las industrias bananera y maderera y para la ganadería. En consecuencia, se han

presentado intervenciones antrópicas en el río León como cortes de meandros, trazado

irregular de caños artificiales que modificaron de manera incontrolada la red de drenaje. El

más significativo de estos cambios es el trasvase inducido por la industria maderera, hace más

de veinte años, de más del 75% del caudal del río León en periodos medios y bajos, hacia la

cuenca del río Atrato a través del caño y las ciénagas de Tumaradó, que hacen parte del

Parque Natural Nacional Los Kativos (Figura 1).

Es muy importante conocer la dinámica de los ríos con canales múltiples (ríos anastomosados,

trenzados y en los deltas), pero son pocas las investigaciones de los procesos morfológicos en

las difluencias generadas por trasvases entre cuencas. Algunas investigaciones recientes de los

procesos de transporte de agua y sedimentos en difluencias (Ramamurthy y Satish, 1986;

Ramamurthy et al., 1988; Wang et al., 1995; Shettar y Murthy, 1996; Khan et al., 2000;

Richardson y Thorne, 2001; Federici y Paola, 2003; Dargahi, 2008; Zanichelli et al., 2004) se

han centrado en modelaciones tanto físicas como numéricas de algunas variables (velocidad,

profundidad y variación de los esfuerzos cortantes, etc.), a fin de entender los procesos que

ocurren en las difluencias de ríos aluviales.

Figura1.- Río León en el Urabá Antioqueño, cerca de frontera con Panamá.

En este estudio se utilizó el modelo CCHE2D (desarrollado por el Nacional Centre for

Computer Hydrosciences de la Universidad de Mississippi) para simular los procesos

hidrodinámicos y de transporte de sedimentos y los cambios morfológicos debido a crecientes

extremas de flujo y sedimento (régimen permanente) en el sector de la difluencia del río León

hacia el caño Tumaradó.

DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA

Hace unos 20 años, la compañía Maderas del Darién bajo la autorización de la autoridad

ambiental en Colombia, conectó el río León con el caño Tumaradó para incrementar el flujo

en el caño y así facilitar el transporte de maderas por flotación. La compañía intentó restaurar

el río a su cauce original, pero las nuevas condiciones hidráulicas (geometría de la sección en

la boca del caño, pendiente, caudales, niveles, sedimentos, etc.) no hicieron posible dicha

labor. Se tiene entonces un cauce que ha evolucionado al igual que los problemas asociados a

su nueva condición.

Los humedales del Atrato, en especial la última ciénaga de Tumaradó está bastante

sedimentada a causa de los grandes aportes de sedimento en suspensión del León. El Parque

Natural Nacional Los Katios (creado en 1974) cubre 72 mil hectáreas que abarca las ciénagas

de Tumaradó, el complejo fluvial del Atrato, los ríos Perancho y Cacarica hasta los límites

con Panamá (Figura 2).

En el tramo del río León aguas abajo del sitio del trasvase, los caudales medios y mínimos son

notoriamente menores, ya que el caño Tumaradó está captando el 82% del caudal líquido y

sólido del río, mientras que el resto (18%) continua por el cauce original del León, sin energía

suficiente para movilizar el sedimento que lleva y los que recibe de las cuencas que drenan

por la vertiente derecha.

Figura 2.- Divisoria de aguas río León (superpuesta sobre imagen de Radar de 1986).

MATERIALES Y MÉTODOS

Se abordaron varios aspectos en el análisis de la dinámica fluvial de la difluencia del río León

hacia el caño Tumaradó: Análisis del régimen de caudales y de sedimentos, Análisis

multitemporal de las imágenes de satélite LANDSAT, Calibración y simulación del modelo

CCHE2D de los procesos de agradación y degradación del lecho y de transporte de

sedimentos en los subtramos de la zona de estudio (difluencia León – Sábalo, difluencia León

– Tumaradó y confluencia León – Sábalo), Análisis de la dinámica del transporte de

sedimentos en las configuraciones de difluencias y confluencias del tramo de estudio para

obtener la distribución del flujo y comparación con la metodología propuesta en 1926 por

Bulle (Vanoni, 1977).

La información primaria para este estudio fue la siguiente: levantamientos topobatimétricos de

detalle de la zona de estudio, aforos líquidos y sólidos antes de cada difluencia o confluencia,

perfiles estratigráficos de la zona de estudio (granulometrías de los estratos), muestreos y

ensayos granulométricos del material del lecho, imágenes Landsat (entre 1987-2005) y

fotografías aéreas.

ANÁLISIS DEL RÉGIMEN DE CAUDALES Y DE SEDIMENTOS

El caudal medio multianual en la estación limnimétrica Barranquillita es 71.6 m3/s (Figura 2),

con valores máximo y mínimo históricos registrados de 340.0 y 1.0 m3/s respectivamente. El

rendimiento medio de la cuenca en la parte alta - aguas arriba de la estación Barranquillita - es

83 litros/s/km2, un 40% mayor que el rendimiento promedio nacional (59 litros/s/km

2). El

valor medio de la tasa de sedimentos es 1838 ton/día (670000 ton/año).

Figura 3.- Localización del río León, el sitio de la difluencia, el caño y las Ciénagas de Tumaradó en la Imagen Landsat de

2001.

La tasa de sedimentos en la cuenca del río León es bastante alta si se compara con otros ríos

del país; por ejemplo, mientras en el río León, a la altura de la estación Barranquillita se tiene

una tasa de 3 ton/día/km2, el rendimiento medio en la cuenca del Río Saldaña es 2

ton/día/km2, el del río Magdalena es 1 ton/día/km

2, y el del río Sogamoso es 4 ton/día/km

2.

Esta alta producción de sedimentos en la cuenca del río León y sus afluentes intensifica los

procesos de agradación del lecho en la parte baja de la cuenca y en el caño Tumaradó (Figura

4), ocasionando pérdida de capacidad de transporte y dando origen a constantes inundaciones

en algunos sectores aledaños al cauce en el tramo del río aguas abajo del sector de la

difluencia.

VARIABILIDAD TEMPORAL DE LA SERIE DE SEDIMENTOS

En la Figura 5 se presenta la carga en suspensión de la estación Barranquillita acumulada en el

tiempo. En ella se observa una tendencia monótonamente creciente en la curva de carga en

suspensión, mostrando que la cuenca durante el periodo de registro no ha presentado

aumentos bruscos en la carga en suspensión como producto de tormentas extremas en la

cuenca. La carga anual media de sedimentos de la estación se estima en 546.034 ton.

Figura 4.- Vista Caño Tumaradó antes de primera ciénaga de Tumaradó.

0

2,000,000

4,000,000

6,000,000

8,000,000

10,000,000

12,000,000

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Figura 5.- Carga en Suspensión acumulada en función del tiempo para la estación Barranquillita

VARIABILIDAD ESTACIONAL

La carga en suspensión para un sitio dado del río puede mostrar un comportamiento estacional

condicionado por el régimen hidrológico de la misma cuenca. Al comienzo de la temporada

invernal algunas prácticas agrícolas (ganadería, arado y quemas) facilitan la producción de

sedimentos en la cuenca al desproteger el suelo de su capa protectora (Morris y Fan, 1998).

Con el incremento de las lluvias durante el invierno se incrementa también la concentración

de sedimento que es transportado por la escorrentía hacia los canales de drenaje (Morris y

Fan, 1998).

Para el río León en la estación Barranquillita se presenta un régimen bimodal en la

concentración de sedimentos en suspensión, un primer periodo Mayo-Junio- Julio y un

segundo periodo en Octubre -Noviembre (Figura 6).

En promedio, los caudales sólidos más altos se presentan en Julio y los más bajos en febrero.

La carga de sedimentos más grande registrada se produjo el 14 de diciembre de 2006 (89361

ton/día) y la más baja el 24 de febrero de 2000 (2.5 ton/día).

0

0.05

0.1

0.15

0.2

0.25

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0.45

ENE FEB MAR ABR MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV DIC

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(kg/

m³)

Figura 6.- Ciclo anual de concentración de sedimentos en suspensión para la estación Barranquillita.

EVOLUCIÓN DEL CAUCE

El patrón horizontal del cauce del río León ha permanecido relativamente estable en los

últimos 20 años, sin embargo, la migración lateral y los cambios en el radio de curvatura, la

longitud y la orientación de las curvas propias de este tipo de corrientes sinuosas, asociados

con los procesos de erosión y sedimentación no son ajenos al río León. Estos cambios

morfológicos son de carácter local. La Figura 7 muestra el cauce del río León en diferentes

años entre 1987 y 2004 en el sector de la difluencia, sobre una composición en falso color

(RGB 743) correspondiente a una imagen Landsat del año 2001. La imagen tiene localizados

algunos puntos donde es notable el cambio en la morfología del cauce.

Figura 7.- Evolución temporal del cauce del río León en el sector de la difluencia, superpuesto sobre la imagen LANDSAT

2001.

En general, en el Sector 1 se observa un proceso de migración lateral lento hacia la margen

izquierda, en el Sector 2 se presenta la migración total del cauce hacia el sur, el Sector 3

conformado por un meandro en proceso de corte se presenta un cambio en la orientación de la

curva (pasa de ser una curva derecha a una curva izquierda), el Sector 4 corresponde a dos

meandros consecutivos en proceso de corte, el Sector 5 corresponde a un tramo recto que se

transforma en dos curvas, en el Sector 6 se observa la migración lateral del cauce hacia su

margen izquierda entre 1987 y 1991, para volver a su posición inicial hacia el año 2001.

GEOMETRÍA DEL TRAMO DE ESTUDIO

Debido a la complejidad del tramo de estudio para su simulación en el modelo CCHE2D

(sistema de confluencias y difluencias, combinado con tramos de canal bastante sinuosos y de

gran curvatura), se dividió el tramo en tres subtramos para la modelación: difluencia León –

Sábalo, difluencia León – Tumaradó y confluencia León – Sábalo (Figura 8).

Figura 8.- Esquema de los subtramos seleccionados para la modelación.

MODELACIÓN HIDRODINÁMICA

A partir del modelo de Toffaletti (1969), se estimó la capacidad de transporte de sedimentos

para las condiciones hidráulicas (profundidades, campo de velocidades y características del

sedimento) asociadas a las crecientes extremas analizadas, con el fin de determinar las

condiciones iniciales de caudal sólido para el modelo. Este caudal sólido se estima en el río

León antes de la difluencia con el caño El Sábalo. Las condiciones iniciales de caudal sólido

para la difluencia León–Tumaradó (DT) y la confluencia Sábalo – León (CS) se obtiene a

partir de los resultados de caudal sólido simulados por el modelo en el extremo aguas abajo

del tramo difluencia León – Sábalo (DS). Para el sedimento en suspensión, se utilizó el

Modelo SEDTRA (conjunto de Laursen; 1958, Yang; 1973 y Meyer Peter y Müller; 1948) y

para el sedimentos de fondo se empleó el modelo de Wu et al. (1999), debido a que ambos

modelos representan en forma adecuada (tamaño del sedimento acorde con los muestreos de

campo) caudal sólido medido en campo durante la campaña de aforo.

En las Figuras 9 a 11 se muestra la geometría de los cauces para los tramos de difluencias y

confluencia analizados.

Figura 9.- Geometría del cauce de la difluencia León-Sábalo.

Figura 10.- Geometría del cauce de la difluencia León-Tumaradó.

Figura 11.- Geometría del cauce de la Confluencia León-Sábalo.

CAUDALES SÓLIDOS DE FONDO PARA LAS CRECIENTES EXTREMAS ANALIZADAS

• DIFLUENCIA LEÓN-SÁBALO (DS)

La Figura 12 muestra la tasa de transporte de sedimento de fondo simulado para la creciente

máxima de 100 años de periodo de retorno.

Para las crecientes simuladas (2.33, 5, 15, 25, 50 y 100 años), el sedimento de fondo (arenas

finas) es transportado principalmente por el León antes de la difluencia hacia El Sábalo y

luego continua por el canal de El Sábalo, mientras que por el canal del río León aguas abajo

de la difluencia, es transportado solo una pequeña cantidad de arenas finas.

Figura 12.- Caudal sólido de fondo para la creciente de 100 años de periodo de retorno, difluencia León-Sábalo.

En promedio, durante las crecientes extremas, el 38% de la carga de fondo es transportada por

el río León hacia aguas abajo en la difluencia León – El Sábalo, y el 62% restante por el caño

El Sábalo.

En cuanto a la división del caudal líquido, durante las crecientes extremas la división del flujo

en la difluencia León – El Sábalo en promedio, es del 65% desviado hacia aguas abajo por el

canal del caño El Sábalo y el 35 % restante por el río León.

• DIFLUENCIA LEÓN-TUMARADÓ

Para las crecientes máximas simuladas de 2.33, 5 y 15 años, el sedimento de fondo (arenas

finas) es transportado principalmente por el canal del Tumaradó. Para las crecientes máximas

de 25, 50 y 100 años, aumenta considerablemente el caudal sólido de arenas en el canal del

León aguas abajo de la entrada al Tumaradó, debido a la removilización del material que

conforma el lecho en este tramo (Figura 13).

En promedio, durante las crecientes de 2.33 a 15 años, el 93% de la carga de fondo es

transportada por el caño Tumaradó hacia las ciénagas de Tumaradó y el 7 % restante por el

León aguas abajo de la difluencia, a partir de las crecientes de 25 a 100 años se reduce tal

diferencia y el León comienza a trasportar aguas abajo de la difluencia el 39% de la carga de

fondo y el 61% restante es transportado por el caño Tumaradó.

Figura 13.- Caudal sólido de fondo para la creciente de 100 años de periodo de retorno, difluencia León-Tumaradó.

En cuanto a la división del flujo, en promedio durante las menores crecientes (2.33 a 15 años),

el 80% del caudal es evacuado por el Tumaradó y el 20 % restante por el León aguas abajo, a

partir de la creciente de 25 años de periodo de retorno aumenta un poco la cantidad de flujo

hacia aguas abajo por el León en la siguiente proporción: 66% por el Tumaradó y 34 % por el

León.

• CONFLUENCIA LEÓN-SÁBALO

La ¡Error! No se encuentra el origen de la referencia. 14 muestra el caudal sólido de fondo

simulado para la creciente máxima de 100 años en la confluencia León-Sábalo. Para las

crecientes simuladas, existe mayor transporte de sedimento de fondo (arenas finas) por el

canal del Sábalo hacia la confluencia, y desde ésta por el León hacia aguas abajo.

Figura 14.- Caudal sólido de fondo para la creciente de 100 años de periodo de retorno, Confluencia León-Sábalo.

En promedio, durante las crecientes de 2.33 a 15 años, el 88% de la carga de fondo es

transportada por el río León hacia la confluencia y el 12 % restante por el Sábalo hacia la

confluencia, a partir de las crecientes de 25 a 100 años se reduce el aporte de sedimento de

fondo del río León transportando hacia la confluencia el 78% de la carga de fondo y el 22%

restante es transportado por el caño Sábalo.

DISTRIBUCIÓN DEL SEDIMENTO

La forma como se distribuye el sedimento en una difluencia y en una bifurcación depende del

modo de transporte del sedimento, de la proporción de caudales en la difluencia, de la

gradación del sedimento que caracteriza el canal y del alineamiento del mismo antes y después

de la bifurcación. Sin embargo, los dos brazos del canal bifurcado deberán reunirse aguas

abajo y ese punto de confluencia controla las pendientes de cada uno de los brazos; entonces,

el brazo más corto llevará un mayor caudal mientras que el brazo de mayor longitud tiende a

sedimentarse.

La ¡Error! No se encuentra el origen de la referencia. 15 muestra los resultados

experimentales de Bulle (1926) para distintos ángulos de derivación (ángulo en grados que

forma el canal principal con el canal derivado). En esta figura se muestran igualmente los

caudales sólidos y líquidos simulados en el modelo CCHE2D para las difluencias y

confluencia durante las crecientes analizadas. Los ángulos de derivación son 27°, 52° y 90°

para la difluencia León – Sábalo, difluencia León – Tumaradó y confluencia León – Sábalo,

respectivamente.

0 30 60 90 120 150 1800

20

40

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Angulo de desviación, en grados

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Difluencia León - Sábalo

Difluencia León - Tumaradó

Confluencia León - Sábalo

Figura 15.- Distribución de la carga de fondo en bifurcaciones. Determinado por Bulle (1926) en Vanoni (1975)

Según esta figura, la mayor parte del sedimento de fondo es transportado hacia el Sábalo

(entre el 65 y 70%), y hacia el Tumaradó (entre el 70 y 85%), mientras que para la confluencia

el sedimento de fondo viaja principalmente hacia el canal principal, entendido este como el

canal del León aguas abajo de la confluencia. Todos estos resultados están acordes a los

resultados obtenidos por el modelo para la difluencia León – Sábalo, difluencia León –

Tumaradó y confluencia León – Sábalo.

RELACIONES ENTRE EL CANAL PRINCIPAL Y EL CANAL DERIVADO

• RÍO LEÓN – CAÑO EL SÁBALO

La ¡Error! No se encuentra el origen de la referencia. 1 muestra los caudales sólidos

totales, en suspensión y de fondo para el Sábalo y el León antes de la difluencia.

Tabla 1. Relación caudal sólido (ton/día) en canal principal y derivado, caño Sábalo

TR

(años)

Qt

León

Qs

Leon

Qf

Leon

Qt

Sábalo

Qs

Sabalo

Qf Sabalo

Qt Sabalo/

Qt León

QsSabalo/

Qs Leon

Qf Sábalo/ Qf León

2.33 55694,4 55134,5 559,9 17254,5 16201,3 1053,2 0,31 0,29 1,88

5 65602,5 64994,2 608,3 19511,0 18483,7 1027,3 0,30 0,28 1,69

15 70940,3 70299,2 641,1 21508,2 20460,2 1048,0 0,30 0,29 1,63

25 84520,9 83701,0 819,9 25754,5 24595,0 1159,5 0,30 0,29 1,41

50 92209,7 91426,1 783,6 26817,0 25650,6 1166,4 0,29 0,28 1,49

100 96930,4 96206,4 724,0 28901,0 27639,5 1261,4 0,30 0,29 1,74

El 65% del caudal líquido va por el caño el Sábalo y el 35% continua hacia aguas abajo por el

río León. La distribución de los sedimentos muestra proporciones inversas (30% liquido y 70

del sólido continúan por el canal del río León) ya que de la carga total que trae el río León

(1% fondo y 98% suspensión), el 70 % continua por el León hacia aguas abajo y el 30% se va

por el caño el Sábalo (98% en suspensión y 188% de fondo, indicando que hay erosión fuerte

del canal en la entrada al Sábalo, por lo cual se prevé el ensanchamiento del canal.

• RÍO LEÓN – CAÑO EL TUMARADÓ

La ¡Error! No se encuentra el origen de la referencia. 2 muestra los caudales sólidos

totales, en suspensión y de fondo para el Sábalo y el León antes de la difluencia.

Tabla 2. Relación caudal sólido (ton/día) en canal principal y derivado, caño Tumaradó

TR

(años)

Qt León

Qs Leon

Qf Leon Qt Tum Qs Tum Qf Tum Qt Tum/

Qt León

Qs Tum/

Qs Leon

Qf Tum/Qf León

2.33 2882.7 1864.4 1018.3 2227.0 1229.0 997.9 0.77 0.66 0.98

5 3223.4 2372.7 850.8 2289.4 1455.6 833.8 0.71 0.61 0.98

15 3432.7 2596.9 835.8 2378.1 1559.1 819.1 0.69 0.60 0.98

25 3808.5 3292.8 515.8 2102.1 1596.6 505.4 0.55 0.48 0.98

50 4392.0 3874.5 517.5 2375.9 1868.7 507.2 0.54 0.48 0.98

100 5454.7 4925.8 529.0 2880.5 2362.1 518.4 0.53 0.48 0.98

En el Tumaradó, el caudal líquido que se deriva corresponde al 82% antes de la difluencia

(82% líquido y 77% del sólido). Los sedimentos se distribuyen proporcionalmente con

respecto al canal principal, es decir, el 98% del material del fondo continúa por el Tumaradó

(¡Error! No se encuentra el origen de la referencia. 2) y el 55% (promedio) del material

suspendido del canal principal continúa por el Tumaradó.

CONCLUSIONES

El modelo CCHE2D representa adecuadamente la división de caudales líquidos y sólidos

medidos en campo en las difluencias y confluencia analizadas; además, identifica las zonas de

agradación tal como se observan en las fotografías aéreas e imágenes de satélite.

Las afirmaciones de H. Bulle (1926) se corroboran en el río León:

• En una bifurcación los caudales sólidos y líquidos se distribuyen en proporciones

diferentes, para el caño el Sábalo las proporciones son 65% liquido y 30% sólido. Para el

caño Tumaradó las proporciones son 73% líquido y 63 % sólido.

• La proporción en la que se distribuyen los caudales sólidos en suspensión y de fondo

también es diferente: en el caño el Sábalo es derivado el 29% de la carga en suspensión,

mientras que la carga de fondo se incrementa apreciablemente debido a los procesos

erosivos antes mencionados. Para el caño Tumaradó la carga se distribuye entre el 98 %

para la carga de fondo y el 60% de la carga del León continua en suspensión por el

Tumaradó.

• En una bifurcación las capas inferiores del flujo con el sedimento de fondo se derivan en

casi su totalidad hacia el canal derivado, como se pudo apreciar en los resultados para el

caño Tumaradó.

• El ángulo de derivación es 27° para el caño el Sábalo y 52° para el caño Tumaradó. Este

ángulo tiene una influencia marcada en el caso de estudio ya que la distribución del

caudal líquido y del sedimento presentan proporciones inversas según el ángulo de

derivación (contrario a la afirmación de Bulle): mas sedimento de fondo para el ángulo de

derivación mayor (como es el caso del Tumaradó).

La gradación del sedimento no muestra diferencias apreciables en los casos de la difluencia o

confluencia analizadas en este estudio; sin embargo, las tasas de transporte sólido se

distribuyen en proporciones diferentes a las correspondientes para el caudal líquido, así:

• En la difluencia León-Sábalo (DS), el 65% del caudal líquido es derivado hacia el caño El

Sábalo y el 35 restante continúa por el río León. El 30% del caudal sólido total es

derivado hacia el Sábalo y el 70% restante continúa por el León. En cuanto al modo de

transporte, el 29% del sedimento en suspensión es derivado hacia el Sábalo mientras que

el 71% restante continua por el río León hacia aguas abajo y el 164 % del sedimento de

fondo es derivado hacia el Sábalo; indicando un aporte importante de sedimentos debido

a los procesos erosivos del canal en la entrada al caño el Sábalo por lo cual se prevé una

ampliación del caño para dar cabida probablemente a todo el flujo del río León.

• En la difluencia León-Tumaradó (DT), el caudal líquido que se deriva corresponde al

73% antes de la difluencia. Los sedimentos se distribuyen proporcionalmente con

respecto al canal principal, es decir, el 63% del caudal sólido total continúa por el

Tumaradó, el 98% del material del fondo continua por el Tumaradó y el 55% (promedio)

del material suspendido del canal principal continua por el Tumaradó hacía las ciénagas

de Tumaradó.

LISTA DE SÍMBOLOS

Qb: caudal líquido en el canal derivado

Qp: caudal líquido en el canal principal

Gb: carga de fondo en el canal derivado

Gp: la carga de fondo en el canal principal

Qt León: caudal sólido total en el río León antes de la difluencia del Sábalo

Qs León: caudal en suspensión en el el río León antes de la difluencia del Sábalo

Qf León: caudal de fondo en el río León antes de la difluencia del Sábalo

Qt Sábalo: caudal sólido total en el caño el Sábalo

Qs Sábalo: caudal en suspensión en el Sábalo

Qf Sábalo: caudal sólido de fondo en el caño el Sábalo

Qt Tum: caudal sólido total en el caño Tumaradó

Qs Tum: caudal en suspensión en el Tumaradó

Qf Tum: caudal sólido de fondo en el caño Tumaradó

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